La Asociación SOS Bebés Robados ha informado de que su abogado, Alberto Prián, ha conseguido que el Juzgado Nº 4 de Cádiz estime un recurso presentado en relación al caso de Antonia C, una mujer que dio a luz en plena Semana Santa de 1.988 en el Hospital Puerta del Mar, cuando ella contaba con tan solo 15 años. Dos días después del parto, por cesárea, le anunciaron que su bebé había fallecido.
“El bebé pesó 3,5 kilos”, señala a este medio Antonia C., “estaba en perfectas condiciones, según mi familia que lo pudo ver en el nido. Pero a las 48 horas de su nacimiento, de madrugada, nos comunicaron que había fallecido... nadie vio el cuerpo, ni yo, ni mi familia... solo un ataúd pequeñito”.
Corría el año 1988 cuando se llevó a cabo el entierro en un nicho propiedad de la abuela, “que no quería que fuese enterrado en una fosa común porque teníamos un nicho en propiedad, donde estaba también mi padre (abuelo del bebé)”. El féretro fue trasladado “por mi hermano”, aunque nadie había comprobado si en su interior estaba el cuerpo.
Años más tarde, concretamente en 1997, la sorpresa fue mayúscula. “Abrimos el nicho para trasladar sus restos y allí no había nada, ni niño, ni siquiera el ataúd. Solo una sábana blanca... y claro, en tan poco tiempo era imposible que se desintegrara. No en vano todavía había restos del ataúd y los huesos de mi padre, que había fallecido treinta años antes”.
Pero tuvieron que pasar aún varios años para que Antonia C. decidiera dar un paso más para resolver este enigma.
“En la tele salían casos de supuestos bebés robados... yo veía ataúdes de 25 años de antigüedad, y el mío en apenas nueve años ya no estaba... era raro. Entonces me puse en contacto con la asociación SOS Bebés Robados de Cádiz y ellos me dieron las pautas a seguir”.
Entre estos pasos estaba recabar toda la información médica del embarazo y posterior parto. “Yo no tenía ni historial, ni nada, era como si nunca hubiera estado embarazada”. Luego, a través del abogado de la asociación, interpuso dos denuncias, una ante la Fiscalía y otra en los juzgados.
“Ambas denuncias fueron archivadas, pero el abogado decidió presentar un recurso, el cual ha sido aceptado y ahora el juzgado ha reabierto el caso”, señala la madre.
Dos doctores están citados a declarar, y ella lo único que quiere es saber qué ocurrió realmente con su hijo, “solo quiero saber la verdad”.