El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha enviado a prisión por integración en organización terrorista a los seis miembros de la célula yihadista desarticulada el pasado viernes en Melilla en una operación conjunta de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional y la Guardia Civil, han informado fuentes de la investigación.
La red yihadista había enviado a al menos a 26 personas --24 marroquíes y dos españoles-- para nutrir a los grupos terroristas de Al Qaeda en el Sahel. Uno de los yihadistas españoles, Benaissa Laghmouchi Baghdadi, retornó de Malí tras pasar allí por los campamentos de entrenamiento del Movimiento para la Unicidad y la Yihad en África Occidental (MUJAO) y se encuentra entre los arrestados.
El resto de los detenidos, todos residentes en Melilla, son: Mustafa Al Lal Mohamed, Kamal Mohamed Driss, Mohamed Mohamed Benali, Mustafa Zizaqui Mohand y Rachid Abdel Nahet Hamed.
El otro muyaidin español enviado para hacer la yihad es un exmilitar que estuvo tres años en el Ejército y fue juzgado por abandono de destino. Zakaria Said Mohamed se encontraría actualmente en Malí realizando labores de adiestramiento operativo sobre explosivos y manejo de armas.
La célula estaba preparada para pasar de la captación y envío de terroristas a zonas de conflicto como Mali, Libia o Siria a la creación de una infraestructura estable en Melilla y Nador con los combatientes que van a ir retornando.
OBJETIVOS EN MARRUECOS
El objetivo principal del grupo era atacar intereses en territorio de Marruecos. Los detenidos cuentan con numerosos contactos con grupos terroristas que operan en el Sahel y otras zonas en conflicto de África.
La operación policial desarrollada la pasada madrugada se considera un importante golpe contra las redes de captación y envío de yihadistas hacia organizaciones terroristas desplegadas en zonas del Sahel, algunas de las cuales son responsables de la comisión de crímenes de guerra como asesinatos de población civil o secuestros de personal extranjero dedicado a la ayuda humanitaria. Este fue el caso de los dos cooperantes españoles capturados por el grupo terrorista MUJAO el 23 de octubre de 2011, que fueron liberados en Malí en julio de 2012.