La Agrupación Sindical de Conductores (ASC), sindicato mayoritario en la sociedad municipal Transportes Urbanos de Sevilla (Tussam), ha adoptado una posición de "cautela" ante el caso de la joven estadounidense atropellada por un autobús de la empresa municipal. Después de que la prueba de consumo de estupefacientes a la que ha sido sometido el conductor haya arrojado un resultado positivo en cocaína, un portavoz del sindicato ha manifestado a Europa Press que es necesario esperar a que el Instituto de Toxicología confirme o no dicho resultado.
La organización sindical, en ese sentido, recuerda el derecho a la "presunción de inocencia" del que gozan todos los ciudadanos y llama "a la calma", solicitando que este caso concreto no sea utilizado contra "la imagen" de la plantilla de Tussam.
El sindicato, de cualquier manera, queda a la espera de que la mencionada prueba de saliva sobre consumo de sustancias estupefacientes sea confirmada o no por el examen definitivo del Instituto de Toxicología.
Mientras el conductor ha negado "rotundamente" haber consumido sustancia alguna y ha pedido someterse voluntariamente a una prueba de sangre ya realizada, Tussam, como medida cautelar y preventiva, ha trasladado a este trabajador a otro servicio ajeno a la conducción de autobuses a la espera de que el juez instructor de la causa reciba los resultados definitivos, ya que el 'drogotest' es una prueba indiciaria.
Asimismo, desde Tussam se han mostrado "sorprendidos" ante tal posibilidad, ya que "laboralmente, se puede decir que es un trabajador ejemplar, lleva 15 años en la empresa, tiene un hoja de servicio impecable y una excelente relación con sus compañeros y superiores".