La empresa Acerinox acordó ayer con su jefe de administración y adjunto a la dirección, Pedro Amores, la salida de este último por un despido realizado de forma improcedente.
El proceso de desvinculación de Amores de la empresa acerera se cierra ahora tras un periodo de mes y medio de tira y afloja entre las dos partes, en el que la firma había tratado de despedir de forma objetiva al que había comandado algunos de sus últimos grandes logros -entre ellos una importante bajada en los costes de producción- aludiendo gestiones perjudiciales para la empresa dentro de su parcela de actividad.
Carmín y Servitec
Concretamente, y según aparece reflejado en su carta de despido, de cuyo contenido ha tenido conocimiento este medio, a Amores se le imputaban gestiones con dos empresas concretas, Carmín y Servitec, a las que supuestamente habría favorecido en detrimento de los intereses de la empresa. Unas acusaciones que el acuerdo de ayer habría dejado sin fundamento.
En el caso de Carmín, empresa contratada por Acerinox para realizar obra civil, el origen del conflicto habría estado, según pudo saber este diario, en la mediación de Acerinox para lograr la subrogación de 35 trabajadores de otra contrata en la empresa Carmín, hace ya varios meses, ampliando así las funciones de Carmín dentro de la acerera y ante la imposibilidad para Acerinox de hacerse ella misma cargo de la plantilla.
En el marco de esa negociación, Amores habría ofrecido a Carmín lo que se conoce como un derecho de tanteo -capacidad de una persona de exigir a otra, con relación a la compraventa de un bien concreto, que se lo venda a él por el precio que ya tenía acordado con un tercero- y el acuerdo se habría refrendado con el beneplácito y la firma de todas las partes, incluyendo el director de Acerinox, Antonio Moreno, y asesores jurídicos.
Sin embargo, extrañamente siete meses después, al iniciar el proceso de despido, la empresa consideraría que dicho acuerdo atentaba contra sus intereses y que Amores había actuado favoreciendo a esa empresa con el citado derecho de tanteo.
De un modo parecido, se fraguó con la empresa Servitec un acuerdo para hacerse prestar determinados servicios haciéndose cargo, además, de un excedente de almacén que habrían de pagar a plazos. Este último acuerdo ha estado en vigor incluso más tiempo que el anterior, pero de igual modo fue usado como argumento. El perjudicado presentó su pliego de descargo y los hechos se pusieron en conocimiento del comité de empresa.
Tras tener conocimiento del despido de Amores, este diario se puso en contacto con la empresa, así como con representantes del comité. En ningún caso se negó el hecho del despido, pero ambas partes eludieron hacer declaraciones al respecto.
El proceso de despido de Pedro Amores como responsable máximo de Administración y adjunto a la Dirección de Acerinox era conocido por la plantilla y el Comité de Empresa desde finales del pasado mes de julio, si bien la empresa ha guardado un mutismo absoluto acerca de esta cuestión.
De hecho, y según ha podido saber este medio, Amores ya fue objeto, dos semanas antes de recibir la carta de despido, de una sanción de empleo -que no de sueldo- de once días. Poco antes de terminar el mes de agosto, todo se hizo efectivo.
En base a estas informaciones, el Comité de Empresa habría recibido de parte de Amores el correspondiente pliego de descargo con las alegaciones del perjudicado.
Si bien este medio tuvo conocimiento del despido poco después de estos hechos, desde el comité y la propia empresa eludieron hacer cualquier declaración al respecto, pese a la insistencia de este medio, y ni tan siquiera confirmaban que se hubiese producido el despido.
De igual modo, otras fuentes consultadas y vinculadas igualmente a Acerinox afirmaban desconocer cualquier tipo de detalle referente a este polémico asunto.
El despido de Pedro Amores se produjo tras más de una década de servicio, durante la que su ascenso fue meteórico, llegando a convertirse en el Jefe de Administración más joven en la historia de la firma (actualmente tiene 39 años).
Llama la atención, teniendo en cuenta los motivos iniciales de su despido, que la medida llega en un momento de bonanza para la firma.
Hay que recordar que en los últimos datos conocidos antes del cese, Acerinox obtuvo en el primer semestre de 2014 un beneficio después de impuestos y minoritarios de 76,1 millones de euros, un 373% superior al del mismo periodo del año anterior
De este modo, y según indicaba la empresa, se confirmaba la mejoría iniciada en el tercer trimestre de 2013. La producción del grupo aumentó, además, un 7% sobre la del mismo periodo del año anterior. El Ebitda generado era, además, un 79% superior al de 2013. Es evidente, asimismo, su reciente remontada en la bolsa y posible vuelta al IBEX 35.
Fuentes consultadas sugieren que pudo haber una represalia por su postura contraria a la contratación de ciertos servicios recientes, que fue muy mediática, por parte de Acerinox.
Nueva jefa
A rey muerto, rey puesto. Este diario ha podido saber que el reemplazo de Pedro Amores como adjunto a la dirección y jefe de Administración de la acerera será María José Guío, hasta ahora jefa de la sección de Laboratorios, a la que apuntan como una persona de la total confianza del director. Si bien la decisión se habría tomado hace ya varios días, no se habría podido hacer oficial mientras no se solucionaba la situación abierta tras la denuncia de Pedro Amores.