La Policía Nacional busca a un hombre de entre 35 y 40 años acusado de un robo con fuerza en un chalet de Montealto tras agredir a su dueño, dejarlo inconsciente y sustraer dinero en metálico y un reloj de oro. Se trata del conocido empresario jerezano José Torreglosa, Hijo Adoptivo de Jerez, muy vinculado al mundo cofrade y que encarnó al Rey Melchor en la Cabalgata de 2006. Aún tiene el susto en el cuerpo. Hace una semana, en plena sobremesa, fue asaltado en su casa de esta urbanizazación por un individuo tras hacerse pasar por repartidor de paquetes. Como él mismo relató a este periódico, los hechos se produjeron el pasado martes 23, en la víspera de la celebración de la Patrona de la Merced, cuando poco antes de las tres de la tarde llamaron al timbre. Cuando José salió fuera vio detrás de la cancela de hierro a un hombre “bien vestido”, con acento “de la zona”, pidiéndole que le abriera porque le traía un paquete y le tenía que firmar. “No suelo abrir la cancela, pero como me dijo que tenía que firmar le dije que se esperara y fui dentro y ya le abrí”.
En ese momento, no se podía imaginar el peligro al que se exponía, del que empezó a ser consciente cuando vio que este sujeto cada vez se aproximaba más para la puerta de dentro de la casa. “Hubo ya un momento que empecé a ponerme delante de mi puerta porque veía que se me colaba y entonces me dijo que a ver si me iba a tener que echar un spray”.
Fue entonces cuando se puso en alerta y empezaron a forcejear, hasta que comprobó que las palabras del individuo no eran ningún farol. “De repente me echó un spray en los ojos, me empezaron a picar muy fuerte, y me caí en redondo al suelo”. Quedó inconsciente y se llegó a golpear con parte del escalón de la puerta, haciéndose una pequeña herida en la cabeza.
Ocurrió hace una semana
Como relata la víctima, fue quizás el miedo del agresor a que su víctima hubiera fallecido y la sangre lo que hizo que este se achantara y no estuviera demasiado tiempo en la casa, aunque sí el suficiente para subir y “desarmar” varias habitaciones, haciéndose con un reloj de oro que le había regalado su difunta esposa y que guardaba en su mesita de noche, y de unos 600 ó 700 euros en efectivo. “Creo que se asustó porque se pensó que me había matado. Se dejó una mochila en el salón, como si se hubiera ido antes de tiempo”, aclara José. Ningún vecino se percató de nada. Fue el propio empresario el que dio aviso a la Policía y a sus hijos, que se presentaron en su casa a toda prisa. Allí tomaron las huellas para abrir una investigación, y tomaron declaración a este vecino, de más de setenta años, y que recuerda perfectamente el aspecto de su agresor.
Debido al forcejeo y el golpe tiene contusiones en la cara, y dolores en el costado, pero pese al miedo está contento de poderlo contar después de haber reforzado también las medidas de seguridad de su casa.
Afortunadamente, el empresario jerezano se recupera poco a poco de este asalto que investiga la Policía Nacional, a la que agradece enormemente el trato recibido desde que dio aviso y se desplazaron a su casa.