La Audiencia de Málaga ha condenado a seis años de prisión a un hombre que llevaba cuatro kilos de cocaína en mochila y que al ver un control policial se dio a la fuga en la motocicleta en la que circulaba, alcanzando al menos los 100 kilómetros por hora. Además, se le impone el pago de una multa de 500.000 euros.
Los hechos sucedieron en octubre de 2012. Según la sentencia de la Sala, a la que ha tenido acceso Europa Press, el acusado iba circulando por la autovía MA-20 de Málaga y transportaba dentro de una mochila cuatro paquetes con forma rectangular, que contenían unos 1.000 gramos de cocaína cada uno, con distinta pureza.
Dichos paquetes tenían varios envoltorios de aluminio, papel de calco, cinta adhesiva o plástico transparente y habían sido "preparados y manipulados por otra persona antes de serle entregados al acusado para su traslado", según declara probado el Tribunal en su resolución.
Cuando el procesado llegó a la altura de un control de tráfico, instalado por otro asunto distinto, y vio a una dotación de la Policía Nacional y a otra de la Guardia Civil, aceleró la moto ante el temor de ser descubierto, pasando entre los vehículos detenidos y rebasando dicho control.
Así, se dirigió a gran velocidad hasta donde se encontraban los agentes, los cuales "tuvieron que apartarse rápidamente para no ser atropellados, refugiándose junto a sus vehículos oficiales que se encontraban en el arcén con los dispositivos luminosos activados", señala la sentencia.
A partir de ahí se inició una persecución por parte de un vehículo de la Guardia Civil y otro de la Policía Nacional, "conduciendo el acusado a una gran velocidad, alcanzando al menos los 100 kilómetros por ahora". Al llegar a la zona del puente de Guadalmar tiró la mochila con la intención de que cayera al río.
Pero, la bolsa cayó en el arcén, por lo que fue recogida por un policía local que se encontraba fuera de servicio y que circulaba con su motocicleta particular. Por estos hechos, se condena al acusado por un delito contra la salud pública de tráfico de droga que causa grave daño y en cantidad de notoria importancia.
Asimismo, se le aplica la circunstancia que atenúa la pena de drogadicción. Se le condena a seis años de prisión y al pago de una multa de 500.000 euros. La sentencia se dicta con la conformidad del procesado y de su defensa con la acusación del ministerio fiscal y es firme.