En rueda de prensa para valorar los datos de la EPA, que indican que ya se han superado los 4 millones de parados, Salgado reconoció que son "malos", e incluso "peores de lo esperado", si bien mostró su seguridad de que tendrá la oportunidad "de comparecer para ofrecer datos mejores".
Por el momento, la vicepresidenta destacó que la caída trimestral del empleo hasta marzo, que se saldó con más de 800.000 nuevos parados, da la medida "de la gravedad y profundidad" de la crisis.
Salgado afirmó que la recuperación del empleo es un "desafío" y toda una "prioridad" del Gobierno, por lo que se comprometió a continuar haciendo "todo lo posible" para frenar la destrucción de empleo y para crear nuevos puestos de trabajo. "Seguiremos adoptando medidas en el contexto del diálogo social porque detrás de cada persona parada hay un problema humano muy importante", subrayó.