Los imputados, todos ellos de origen marroquí, se enfrentan a una petición de pena de cinco años de cárcel para cada uno. El juicio se reanudó ayer tras hacer sido suspendido el pasado 14 de abril a causa de la incomparescencia del agente policial encargado de la instrucción del caso, quien en el momento de la primera vista judicial se encontraba ejerciendo una comisión de servicio en la embajada de Benin.
La detención de los dos primeros acusados, de 31 y 40 años, respectivamente, se produjo el 12 de enero de 2001 durante el transcurso de la llamada Operación Florín, llevada a la práctica por la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de Algeciras. Según el escrito de acusación presentado por el Ministerio Fiscal, los detenidos actuaban como correos de una importante red dedicada también al tráfico de estupefacientes. Su misión consistía en el transporte y la posterior conversión del dinero negro.
En aquella operación policial, se intervino un vehículo de la marca Renault modelo Megane, con matrícula GI-2498-BM, en un aparcamiento privado de la ciudad. En su interior se hallaron ocultos unos 3.600.000 euros (594 millones de pesetas de la época).
La Udyco efectuó después un nuevo registro, en este caso en una vivienda de la barriada de San José Artesano, donde se encontraron otros 24.000 euros procedentes supuestamente de la droga.
La investigación siguió su curso hasta que se logró la detención de El Alami E.H., el tercer y último de los acusados. La operación llevada a cabo por la unidad policial algecireña fue considerada en su momento como la mayor intervención de dinero en efectivo llevada a cabo por la Policía en el municipio.
Conclusiones
Tras el testimonio de hasta 10 agentes del Cuerpo Nacional de Policía, incluido un mando oficial quien entonces estaba al frente de la operación, y de otros cuatro testigos solicitados por las partes, fiscal y defensa elevaron sus escritos a conclusiones definitivas. Por parte del fiscal, se insistió en que existen evidencias suficientes como para mantener la petición de cárcel para los acusados, mientras que la defensa recurrió durante el proceso a las dilaciones, en su opinión indebidas, que han tenido lugar durante los casi ocho años que ha durado el proceso de instrucción.
Entre ellas, ya en la anterior vista la abogada hizo mención a que el escrito de acusación no se finalizó hasta 2008, y que se produjo una reiteración en la apertura de diligencias en varias salas. En base a la versión presentada por el fiscal, los presuntos blanqueadores transportaban grandes cantidades de dinero utilizando para ello el Puerto de Algeciras. La sentencia se conocerá en los próximos días.
