La Audiencia Provincial de Huelva ha condenado a un vecino de Huelva a tres años de cárcel después de que intentará agredir sexualmente a una conocida cuando ambos se encontraban a solas en su domicilio en septiembre de 2011.
En la sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, el tribunal lo considera al autor criminalmente responsable de un delito de agresión sexual en grado de tentativa y de una falta de lesiones.
Le impone además de la pena de cárcel, cinco años de libertad vigilada y prohibición de aproximarse a la víctima, a su domicilio y lugar de trabajo, a una distancia inferior a 500 metros, así como la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio o procedimiento durante cinco años.
Asimismo, se le condena al pago de una multa de un mes con una cuota diaria de 6 euros por la falta y que indemnice a la víctima en la cantidad total de 5.532 euros, más los intereses devengados.
Se considera probado que el condenado sobre las 17.00 horas del 13 de septiembre de 2011, cuando se encontraba a solas con la víctima en el salón de su domicilio, con la intención de satisfacer sus deseos se acercó a la butaca en que aquélla estaba sentada y, agarrándole fuertemente contra el sillón, le inmovilizó los brazos y las piernas e intentó penetrarla vaginalmente.
Acto seguido el acusado le dijo a la víctima que no le dijera lo ocurrido a nadie y menos a la Guardia Civil, que "si no le quitaba él el pellejo buscaría alguien que lo hiciera por él".
Como consecuencia del forcejeo la mujer sufrió lesiones en distintas partes del cuerpo.
La sentencia de la Audiencia Provincial de Huelva ya es firme al haber rechazado el Tribunal Supremo el recurso de casación interpuesto por el condenado en el que alegaba vulneración del derecho a la presunción de inocencia y a la tutela judicial efectiva.
