El presidente cubano aprovechó el marco ofrecido por la reunión ministerial del Movimiento de Países No Alineados (NOAL) para rechazar la posibilidad de que La Habana responda con “gestos” a las recientes medidas aprobadas por Obama y al ofrecimiento de la Casa Blanca de un “nuevo comienzo” en las relaciones bilaterales.
“No es Cuba la que impide a los empresarios de ese país hacer negocios con el nuestro (...) y por lo tanto no es Cuba la que tiene que hacer gestos”, dijo Castro.
Afirmó que las medidas aprobadas por el presidente Obama a mediados de abril para levantar las restricciones de viaje a la isla de los cubano-americanos y eliminar los límites a las remesas son “positivas”, aunque, en su opinión, de “alcance mínimo”.