Este portuense lleva trabajando desde los 12 años en el mundo de la hostelería y la restauración. Empezó su andadura laboral en la Cervecería “El Puerto”. Tras venir del servicio militar, estuvo en el Hotel Playa de la Luz y de ahí, pasó a la Cafetería “Las Columnas”; luego, trabajó en la Cervecería España y en Casa Flores; en 1985 montó su propio bar.
¿Por qué decidió montar el Bar “Pijota”?
-Todo comenzó en 1985, fue cuando monté mi primer bar en la céntrica calle Javier de Burgos donde estuve durante diez años seguidos. Luego compré mi propio local en la Plaza de la Cárcel, junto al Hotel Los Cántaros, donde he pasado otros veinte años de mi vida.
Lo monté porque había trabajado en muchos bares y para mucha gente. Me ilusionaba crear mi propio local y sobre todo, mi propia clientela. Este bar ha sido toda mi vida, lo cerré porque me jubilé, sino seguiría al pie del cañón.
Su local siempre ha gozado de una buena clientela, siempre ha venido mucha gente desde lugares muy dispares...
-Me he preocupado siempre de tener productos de muy buena calidad. Siempre he comprado pescado fresco y he ofrecido todo mi saber hacer a mis clientes y conocidos. Creo que ha sido muy importante el tener la cocina abierta, eso siempre le ha llamado mucho la atención a mis clientes.
Mi carta era muy variada, aunque siempre relacionadas con el mar. Si tengo que hablar sobre mis platos, destacaría mis tortillitas de camarones, los calamares a la plancha y los boquerones rellenos.
Muchos de mis clientes se han convertido en grandes amigos.
¿Cómo ve la oferta de restauración y hostelería en el centro de la ciudad?
-Pues poco a poco se va superando, hay buenos bares. Se han abierto últimamente nuevos sitios para poder tapear y cenar. Ya no sólo hay cervecerías en el centro, también hay restaurantes de comida tematizada o de los denominados “gourmet”. Existe mucha competencia en cuanto al tema de hostelería se refiere, y como hándicap yo señalaría la falta de clientela.
¿Qué atractivos necesita la ciudad para volver a ser la población por excelencia de la Bahía para tapear?
-El centro se ha quedado antiguo, falta gente joven que llene las calles. Hay que reconstruir el centro, arreglar las calles y vender o alquilar las viviendas a precios asequibles.
El aparcamiento es algo muy importante, ya que hay que facilitar al público la posibilidad de aparcar y que ésta, sea cercana.
El casco histórico necesita una infraestructura comercial que anime al consumo y que se aproveche al 100% ese Guadalete con más amarres para barcos.
Se necesitan toldos en las calles para así minimizar el uso de sombrillas y hacer las calles más frescas. Las calles necesitan más limpieza y sobre todo, el adecentar las fachadas. n
