El Consorcio del Centro Federcio García Lorca, que albergará en Granada el legado del poeta, estará a partir de ahora adscrito al Ayuntamiento de Granada, según sus nuevos estatutos, que excluyen sin embargo a la Fundación García Lorca, que se encargará de coordinar el que será el nuevo Instituto de Estudios Lorquianos.
Los nuevos estatutos, publicados este martes en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y consultados por Europa Press, modifican los de 2007, que encomendaron la gestión del centro a la Fundación que preside la sobrina del autor de 'Yerma', Laura García Lorca, una institución privada sin ánimo de lucro creada en 1984.
A partir de ahora, la Fundación, puesta en las últimas semanas en cuestión por la falta de justificación de ayudas públicas destinadas a la construcción del Centro Lorca, lo que ha motivado una denuncia de su presidenta al secretario de la entidad, se encargará del nuevo Instituto de Estudios Lorquianos, que centrará su labor en la investigación de la obra del autor, así como en el impulso de un intercambio permanente con centros homólogos de otras ciudades y países. Su coordinador o coordinadora será nombrado por el Consejo Rector, a propuesta de la Fundación.
El Consorcio, constituido a partir de ahora por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, la Junta de Andalucía, la Diputación de Granada y el Ayuntamiento de Granada, al que se adscribe su gestión, tiene entre sus funciones la conservación y el estudio de los fondos de la Fundación Federico García Lorca, actualmente depositados en la Residencia de Estudiantes de Madrid; o la difusión y el estudio de la obra de García Lorca mediante la creación del Instituto de Estudios Lorquianos.
También cuenta entre sus objetivos la organización de actividades culturales que permitan ofrecer al público una
selección de excelencia en el ámbito de la creación contemporánea en literatura, música, artes plásticas, pensamiento, cine, teatro, o artes audiovisuales, de manera que el centro que se abrirá en la Plaza de la Romanilla será un referente cultural permanente no sólo para la ciudad de Granada, sino también, para Andalucía y el conjunto del Estado Español, con relevancia internacional; o la organización de actividades pedagógicas, especialmente dirigidas a niños y jóvenes.
El Consejo Rector será el máximo órgano colegiado de gobierno del Consorcio Centro Federico García Lorca, y su Presidencia tendrá carácter rotatorio, alternándose por periodos de dos años entre la persona titular de la Consejería competente en materia de Cultura y el alcalde de Granada, en este caso José Torres Hurtado, que asume en primer lugar esta responsabilidad.
La Vicepresidencia será ejercida con el mismo carácter rotatorio por aquel representante al que no corresponda la Presidencia, y, como vocales, el consorcio contará con dos representantes del Ministerio de Cultura, dos representantes de la Junta de Andalucía, dos representantes del Ayuntamiento de Granada, y en representante de la Diputación Provincial de Granada.
Para la prestación de los servicios y la atención de la dirección administrativa y gerencial, gestión y funcionamiento general del Consorcio y del Centro Federico García Lorca, el Consejo Rector designará una persona que ejercerá la Dirección-Gerencia, con respeto a los principios legales de "publicidad, mérito y capacidad".
De acuerdo a estos estatutos, el Consejo Rector del Consorcio se reunirá con carácter ordinario dos veces al año, y lo hará en forma extraordinaria cuando la persona titular de la Presidencia del mismo lo estime necesario o a solicitud de tres vocales como mínimo. A estos efectos, las reuniones ordinarias se producirán en el primer y último trimestre del año. A las reuniones del Consejo Rector, asistirán, "con voz y sin voto", la persona titular de la Dirección-Gerencia del Consorcio, así como el coordinador o coordinadora del Instituto de Estudios Lorquianos.
Para la fiscalización de las cuentas, según se recoge en el BOE y, tal y como publica este miércoles el diario 'Granada Hoy', se llevará a cabo una auditoría de las cuentas anuales que será responsabilidad del órgano de control de la Administración a la que está adscrito. No obstante, podrá someterse a auditoría externa tanto la gestión en su conjunto como aquellas cuentas y operaciones que "presenten circunstancias que así lo aconsejen".
La inauguración del Centro Lorca, que ha sufrido numerosos retrasos por cuestiones económicas pero que se fijó finalmente para el pasado 5 de junio, coincidiendo con el nacimiento del poeta, tuvo que volver a aplazarse sin fecha, después de que el Ministerio de Cultura reclamara a la Fundación Lorca que justificara una serie de subvenciones millonarias concedidas para la construcción.
Concretamente, la Fundación tiene una deuda de 12 millones de euros sin pagar o justificar a, entre otros, Ferrovial, la constructora del centro que rendirá homenaje a la memoria del poeta, que ya está terminado y que esta empresa se niega a entregar por la deuda; y al Ministerio de Cultura, que reclama 1,7 millones de euros por las subvenciones nominativas concedidas para el espacio de la Plaza de la Romanilla.
La situación en la Fundación llevó a su presidenta a presentar una querella contra el secretario de la institución, Juan Tomás Martín, por posible falsedad documental y apropiación indebida, tras lo que aprobó su cese.
La Fundación, que se reunió recientemente para analizar las cuentas, ha garantizado que investigará "en profundidad" todas las irregularidades que se han localizado en las cuentas de la institución.