Así se lo explicó un conductor del servicio público de transportes de otra línea a los usuarios que esperaban estoicamente en la parada del Paseo Marítimo al autocar que debía efectuar su salida a las 14.15 horas, y que tras esperar entre 15 y 30 minutos fueron informados de que tendrían que esperar la llegada del autobús de la línea de El Saladillo, que tenía prevista su llegada a las 15.00 horas.
Muchos pasajeros, molestos por la situación, acabaron marchándose o utilizando el servicio de taxi, mientras otros decidieron esperar.
Los usuarios se lamentaban de que en la marquesina que cubre la parada central de la barriada no se hallaba ningún cartel ni aviso oficial que indicase la suspensión de la línea por avería del vehículo.
Este hecho se une al ocurrido el pasado martes, cuando coincidiendo con la celebración del Mercadillo, uno de los dos autobuses que hace la línea San Bernabé-Eroski sufrió una avería y no fue reparado hasta el turno de las 11.00 horas, por lo que un buen número de pasajeros tuvieron que quedarse a la espera de que llegase el autobús.
En los últimos meses, las averías en los autobuses de las líneas urbanas han sido frecuentes. Una de ellas se produjo el pasado 9 de mayo, cuando un vehículo de la flota de autobuses urbanos provocó un accidente por alcance en la avenida Virgen del Carmen que dejó como consecuencia un herido de carácter leve.
El siniestro, que tuvo lugar hacia las 15.50 horas de aquel día a la altura del bloque 39 B de la avenida, tuvo lugar, según fuentes consultadas por este diario, por un fallo en los frenos del autobús, tal y como comunicó el propio conductor a los agentes del servicio de Atestados de la Policía Local.
El vehículo de la CTM, con matrícula M 4380 ST, impactó contra un turismo de la marca Seat modelo Córdoba con matrícula 3597 BBC, que iba conducido por P.C.C., de 69 años, quien resultó herido de carácter leve.
Preocupación
Entre los usuarios existe cierta preocupación ante la posibilidad de que la cercanía de la fecha de puesta en funcionamiento de los nuevos autocares, el próximo 1 de julio, motive que los que ahora están en marcha, con evidentes signos de antigüedad que se traducen en averías, no sean reparados y afecten de manera significativa al servicio.
Una de las polémicas que más polvareda ha levantado en los últimos meses fue la supresión, a causa de la avería y no reposición de los vehículos, de la línea que comunicaba el centro de la ciudad con la barriada de La Juliana. Desde el momento en que se produjo esta carencia, han sido numerosas las quejas por este motivo.
La última de ellas fue, hace pocas fechas, por iniciativa del Partido Andalucista, quienes a requerimiento de los propios vecinos de La Juliana solicitaron que con la entrada de la nueva empresa se reactiven ésta y otras líneas que se han ido suprimiendo en los últimos tiempos.
La nueva flota de autobuses de tiene previsto entrar en funcionamiento el próximo 1 de julio.
El precio del billete permanecerá igual, se asegurarán los puestos de trabajo y se intentará mejorar los ratios de usuarios, que han pasado de 3.105.850 en 1992 a sólo 2.007.809 en 2008, a pesar del aumento de 25.000 personas.
La concesionaria del servicio, CTM, deberá cambiar su forma jurídica de cooperativa a sociedad mercantil para poder ser vendida a Grupo Ruiz.