El portavoz del Gobierno provincial de Paktika, Hamidulá Zewak, dijo a Efe que 34 insurgentes murieron y un soldado extranjero resultó herido durante el enfrentamiento, que duró toda la noche hasta ayer por la mañana.
En un comunicado, el mando militar de EEUU en Afganistán precisó que el combate se produjo en el distrito montañoso de Wor Mayi, situado en Paktika y limítrofe con Paquistán, donde las tropas atacaron un campamento insurgente desde el que supuestamente operaba un líder de la red Haqqani, llamado Sangeen.
“Docenas de insurgentes bien armados comenzaron inmediatamente a disparar contra las fuerzas combinadas para repeler el asalto”, aseguró la comandancia, que situó el número de bajas insurgentes en “al menos 29”.
Las tropas se enfrentaron a grupos de insurgentes parapetados en posiciones fortificadas del recinto guerrillero y solicitaron apoyo de la aviación para acabar con la resistencia armada.
Durante el asalto, según la nota, al menos seis insurgentes hicieron detonar chalecos explosivos, aunque sólo un soldado de la coalición resultó herido leve a resultas de una de las explosiones.
Las fuerzas de la coalición encontraron varios almacenes de armas y equipación de combate tras el asalto, durante el cual ningún “no combatiente” resultó herido.
Sangee, también conocido como Fateh, es un supuesto miembro de la red Haqqani, una organización insurgente supuestamente responsable de numerosos ataques contra las fuerzas en el este de Afganistán.
Horas antes, la coalición había denunciado en otro comunicado la muerte el miércoles de siete civiles afganos víctimas de disparos de mortero de los insurgentes en la localidad de Asadabad, situada en la provincia de Kunar.
Al menos cuatro heridos en el suceso fueron transportados a distintos centros médicos de la coalición estadounidense en Afganistán, mientras que el resto recibió cuidados en una unidad sanitaria local.
En 2008 en Afganistán, 2.118 civiles murieron a causa del conflicto, el 55% de ellos en ataques de la insurgencia y el 39% en acciones de las tropas afganas e internacionales, según datos de la misión de la ONU en el país.
Atentados en Paquistán
Al menos tres personas han muerto y siete han resultado heridas en un atentado contra un puesto de control de las fuerzas de seguridad, en la cuarta explosión registrada ayer en el noroeste de Paquistán.
Según una fuente policial citada por la cadena privada Dawn, un artefacto colocado en un autorickshaw (triciclo motorizado) estalló en la localidad de Dera Ismail Khan y acabó con la vida de tres personas.
Por otra parte, cinco personas murieron ayer y otras 70 resultaron heridas en una doble explosión en un bazar de la ciudad noroccidental paquistaní de Peshawar, en cuyas afueras un ataque suicida causó dos muertos unas dos horas después, dijeron a la agencia de noticias Efe fuentes policiales.
Las dos explosiones tuvieron lugar en un intervalo de diez minutos en las concurridas zonas de Kabari y Quissa Khwani, separadas por una estrecha avenida y situadas en el casco antiguo de la capital de la Provincia de la Frontera del Noroeste (NWFP).
Los artefactos, que estaban colocados en motocicletas y fueron activados por control remoto, tenían una carga explosiva de unos 5 kilogramos cada uno, según una fuente policial citada por el canal de televisión privado paquistaní Dawn.
Las explosiones causaron graves desperfectos en decenas de tiendas y vehículos.
Tras el ataque, miembros de las fuerzas de seguridad registraron edificios de la zona y acabaron con la vida de dos supuestos terroristas y arrestaron a otros dos sospechosos, según una fuente policial consultada por Efe.
Los heridos, entre los que se encontraban varios niños, fueron trasladados a un hospital de la ciudad, mientras que la Policía acordonó la zona.
Dos horas después, al menos dos personas murieron en un atentado suicida registrado contra un puesto de control policial, esta vez en las afueras de Peshawar.
Un suicida empotró el vehículo cargado de explosivos en el que viajaba contra un puesto de las fuerzas de seguridad en la zona de Sarakhara, a pocos kilómetros de Peshawar.
En el atentado murieron al menos dos agentes y cinco personas resultaron heridas, según una fuente policial.
Estos atentados se producen al día siguiente de que un comando terrorista perpetrara un ataque suicida contra instalaciones policiales y de los servicios secretos en la ciudad de Lahore (este de Pakistán), que acabó con la vida de al menos 25 personas y causó heridas a centenares.