Cuando parecía que en el mundo del olivo y sus derivados todo estaba inventado, un empresario de la localidad sevillana de Arahal, Rafael Rodríguez, ha decidido dar un paso adelante más y crear los que consideran, por su origen, el aceite de oliva "más sensual del mundo".
Se trata de Ecolivum, un tipo de aceite de oliva que tiene la particularidad de realizarse con la base de una aceituna con forma de pecho de mujer, una rareza propia de la comarca donde se encuentra Arahal y que ha sido una de las principales atracciones para los visitantes de la feria Sabor a Campiña, que se celebra durante el fin de semana.
Su creador ha explicado a Efe que sacar adelante este producto supuso más un empeño personal que empresarial, "que conseguimos sacar adelante con la variante de aceituna Tetuda", algo "natural para nosotros, porque ese olivo ha existido siempre en la comarca, y se ha podido ver en campos de Arahal, Marchena o Morón de la Frontera, pero casi no se comercializaba".
Por eso, recuerda que su abuelo "hizo en su día una plantación, y yo siempre le preguntaba por qué era tan curiosa esa variedad de aceituna, hasta que hace un año conseguimos una cosecha de algo más de una hectárea, y sin saber el resultado que podría tener, la verdad es que ha funcionado", explica.
Por ahora, es el primero del mundo de esta variedad, con una producción muy corta, por lo que la edición es limitada, y su creador indica que sus características organolépticas son diferentes a otros similares y que destaca por ser "un aceite frutado, sabe a huerta, tomate, alcachofa, pimiento, equilibrado en dulce, amargo y picante".
Su salida al mercado ha sido todo un hito, como se explica a las personas que ven las primeras botellas en la feria de muestras de Arahal, sobre todo porque los árboles que dan esta particular aceituna suelen ser ejemplares sueltos entre los olivares donde predominan las variedades denominadas manzanilla y gordal, como las principales productoras de aceite.
"Es un producto con personalidad propia, y de ahí su originalidad", indica su creador, que explica que su espíritu se puede inspirar incluso en los romanos, "que relacionaban el aceite y algunos usos del mismo con la sexualidad, con lo que hasta el logotipo del nombre da algunas pistas sobre lo que este producto nos ha inspirado".
Lo raro del producto condiciona su precio final para el consumidor, ya que lo que se ha sacado al mercado para su venta definitiva es una producción limitada de unas 150 botellas con medio litro de producto, a un precio que ronda los 17 euros por botella.
"Hemos cumplido con la media de que se obtengan unos 15 kilos de aceite por cada 100 de aceituna, con premisas como que la aceituna, en este caso, es recolectada manualmente para no arañar el fruto y que no se quede en el suelo", un trabajo artesanal que ha supuesto el tercer producto que esta firma saca al mercado, bajo la marca Ecolivum Xtra, tras sacar su primer aceite de oliva virgen extra ecológico de aceitunas manzanillas en 2014.
Y es que toda la base de la producción se rige por los preceptos de la agricultura ecológica, un sistema de cultivo basado en la utilización equilibrada de los recursos naturales, sin emplear productos químicos de síntesis, como el abono químico y los herbicidas
