El vestuario del Deportivo atraviesa una crisis interna antes del encuentro con el que despedirá la temporada ante el Real Madrid el próximo sábado en el estadio de Riazor, donde los blancos aspiran a conquistar la Liga BBVA si falla el Barcelona en Granada.
En la vuelta del equipo coruñés al trabajo, el centrocampista Pedro Mosquera admitió que "en la segunda vuelta" se han dado "situaciones complicadas dentro del vestuario" y aseguró que "quizás alguno" de sus compañeros no han sido "del todo" profesionales "a su modo de ver".
Las declaraciones del centrocampista blanquiazul se producen el día en que el lateral portugués Luis Carlos Correia, 'Luisinho', y Alberto Lopo se ejercitaron al margen del grupo por decisión del cuerpo técnico, que hace quince días apartó al luso por mostrar sus diferencias con Víctor Sánchez del Amo en el vestuario de la ciudad deportiva de Abegondo.
El lateral se quejó de la doble vara de medir de Víctor, ya que en verano el club le había sancionado a él con cuatro días de suspensión de empleo por un incidente con Alejandro Arribas, mientras que para Lucas Pérez y Oriol Riera, que protagonizaron un rifirrafe en las sesiones previas al partido ante el Getafe, el cuerpo técnico solo propuso una multa.
Víctor readmitió a Luisinho la semana pasada, pero el luso, como Lopo, fue descartado por decisión técnica para el partido ante el Villarreal.
El viernes, ambos se entrenaron en la ciudad deportiva de Abegondo mientras que los convocados se ejercitaron en el estadio de Riazor.
El Deportivo selló la permanencia el domingo con su triunfo (0-2) en El Madrigal, victoria que el internacional marroquí Fayçal Fajr dedicó a los compañeros que se habían quedado en Galicia.
"Quiero dedicar la victoria a todo el grupo, a los que no están también en la convocatoria como Luisinho, Lopo y Juan Domínguez", afirmó a los periodistas el jugador blanquiazul, autor del 0-1 en ese partido.
En cambio, su compañero Juanfran Moreno aseguró que el partido de Villarreal era para jugadores "comprometidos", para los que habían "estado ahí todo el año", un encuentro que él no quería perderse y en el que jugó en una posición que no era la suya, el lateral izquierdo.
A esas declaraciones de Mosquera, Fayçal y Juanfran que reflejan una crisis en la plantilla del Deportivo, se suma la situación del técnico, Víctor Sánchez del Amo, que firmó una primera vuelta sensacional pero en la segunda solo ha ganado dos partidos.
Tras el partido de Villarreal, el preparador madrileño, muy cuestionado en las últimas semanas, recordó que tiene un año más de contrato, algo en lo que también hizo hincapié el que ha sido, hasta ahora, su mayor respaldo, el presidente del club, Tino Fernández.
Sin embargo, el dirigente no se mostró rotundo ni confirmó la presencia de Víctor en el banquillo del Deportivo la próxima temporada.
"Soy rotundo en que tenemos un contrato firmado, eso lo he aclarado suficientemente, y vamos a tener una evaluación sobre cómo vemos las cosas, cómo fue el año, y la haremos cuando termine la temporada", respondió cuando fue preguntado sobre el futuro del técnico.
Con el futuro del cuerpo técnico en el aire y aguas revueltas en el vestuario, el Deportivo despedirá ante el Real Madrid una temporada en la que los problemas en el vestuario empezaron en pretemporada con el enfrentamiento entre Luisinho y Arribas y se han intensificado en las últimas semanas.
