Ucrania celebra, casi como una victoria militar, el triunfo de su cantante Jamala en el festival de Eurovisión, donde se impuso al representante de Rusia, Sergey Lázarev, uno de los principales favoritos, quien terminó en tercer lugar.
"¡¡¡Bien!!! ¡Una presentación increíble y victoria! ¡Toda Ucrania te lo agradece de corazón, Jamala!", escribió exultante en Facebook el presidente ucraniano, Petró Poroshenko.
En una entrada en Twitter, el jefe del Estado afirmó que con la voz de Jamala "habló todo el pueblo de Ucrania" y que, "como siempre la verdad, ha vencido".
"1944", el tema interpretado por la cantante ucraniana, trata de la deportación de los tártaros de Crimea ordenada por el dictador soviético Iosif Stalin durante la Segunda Guerra Mundial y levantó objeciones en Rusia, que la considero un ataque velado al Kremlin.
Y es que los tártaros de Crimea han denunciado que después de que Rusia se hiciera con el control de la península en 2014 la situación para ellos ha empeorado de manera significativa.
A finales de abril el Tribunal Supremo de Crimea prohibió las actividades del Medzhlis (la asamblea popular tártara), al que calificó de organización extremista por negarse a aceptar la anexión rusa de la península ucraniana.
Según Jamala, hija de tártaros deportados de Crimea, su canción no está vinculada con hechos recientes en la península, sino con su historia familiar.
"Si Dios quiere, un maravilloso día nos reuniremos todos en una Crimea libre de ocupantes rusos, en la antigua y gloriosa ciudad de Bakhchysarai (capital histórica de los tártaros crimeos), escribió en Facebook el presidente del Medzhlis, Refat Chubárov, a quien las autoridades rusas le prohibieron la entrada en Crimea hasta 2019.
Chubárov recalcó que la victoria de Jamala es "otro paso importante" en la consecución de ese objetivo.
"Bravo, Jamala. Brillante y merecida victoria. Ucrania vence y siempre vencerá. Crimea será ucraniana", escribió en Twitter el ex primer ministro Arseni Yatseniuk.
En esa misma red social el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Pavló Klimkin, publicó la siguiente entrada: "La verdad siempre se impone, como Jamala y Ucrania lo han hecho esta noche. Felicitaciones y muchas gracias. Y, por favor, no olvidéis que Crimea es ucraniana".
Ucrania, que declaró a Rusia "país agresor" por la anexión de Crimea y su apoyo a los separatistas prorrusos que actúan en el este del país, había amenazado con boicotear la próxima edición del festival de Eurovisión en caso de que el cantante ruso ganara la final de Estocolmo.
Según las normas de Eurovisión, el país ganador organiza la siguiente edición del festival.
Hace dos años, nada más producirse la anexión de Crimea, Lázarev, el representante ruso en Eurovisión, dijo en una entrevista con la televisión ucraniana que no compartía la euforia de sus compatriotas por dicho acontecimiento y que, en su opinión, la península pertenecía a Ucrania.
Sus palabras causaron controversia en Rusia y, poco después, el cantante aclaró que sus afirmaciones habían sido sacadas de contexto durante la edición de la entrevista.
Aun así, la audiencia ucraniana valoró la presentación de Lázarev con la máxima puntuación, 12 puntos, pero el jurado ucraniano no le concedió ni un solo voto.
Medios rusos destacaron que el nuevo sistema de votación en Eurovisión, que suma las preferencias del público y las de jurados de los países que participan en el festival, perjudicó al representante de Rusia, que se impuso a Jamala en votos de telespectadores.
"En parte, ha sido resultado de la guerra propagandística e informativa que se libra contra Rusia", dijo al comentar el tercer lugar de Lázarev la vicepresidenta del Comité de Cultura de la Duma o Cámara de Diputados de Rusia, Elena Drapeko, en declaraciones a la agencia oficial rusa TASS
No obstante, la legisladora felicitó a Jamala por su voz e interpretación, aunque opinó que su canción "no es un tema que los jóvenes vayan a cantar o a escuchar muchas veces".