La Virgen de la Palma ya reposa en la Plaza del Mar, en el Rinconcillo. Su salida del mar se produjo sobre la una y media del mediodía, acompañada del fervor y del calor de la multitud que salió a recibirla en un día cargado de nubes.
Los momentos previos fueron de emoción, pero también de diversión, entre grupos de bañistas que se salpicaban agua unos a otros.
Sin embargo, la atención se centró poco después en los barcos que traían a la virgen.
Chispeaba entonces, pero eso no quitó que los presentes disfrutaran de un momento muy esperado. La Palma fue recibida entre vivas e incluso entre lágrimas por algunas de las personas presentes, entre ellas miembros de la asociación el Mero, que como cada año logra dar vida a esta añeja tradición.
La Palma fue recibida en la misma orilla por el alcalde, José Ignacio Landaluce, quien le impuso la medalla de la ciudad.
De ahí, la procesión tardó unos minutos aún en llegar a la Plaza del Mar, donde aguardaba una muchedumbre a la espera de recibir la imagen de la Virgen.
El evento ha atraído el interés de muchos visitantes y de medios de comunicación. Entre ellos, las cámaras del programa Andalucía Directo de Canal Sur Televisión narraron cómo era recibida la Virgen por algecireños y visitantes.
Tanto Landaluce como la teniente de alcalde delegada de Turismo, Susana Pérez Custodio, han destacado que “es muy bonito poder vivir y disfrutar esta fiesta que se ha convertido en un referente en Andalucía y España”. La teniente de alcalde responsable de Feria y Fiestas, Juana Cid, destacó el esfuerzo llevado a cabo por los socios de El mero y el magnífico resultado a pesar del clima.
Por su parte, el presidente de “El Mero” ha agradecido a los algecireños su participación y ha dado las gracias por la plena disposiciòn municipal a colaborar en la organización.
