Ayer se celebró el día internacional de esta enfermedad, que padecen 4.000 personas en España y que es diagnosticada a tres enfermos cada día.
Sin embargo, la ELA sigue siendo una gran desconocida ya que, aunque se diagnostican tantos casos como de esclerosis múltiple, el 90% de los afectados apenas viven entre 2 y 5 años.
Al padre de Marisa le dijeron que tenía ELA en 2004; “pensábamos que era como la esclerosis múltiple pero que, al ser lateral, sólo afectaba a un lado del cuerpo”, cuenta Marisa.
Pero su neurólogo les explicó que esta enfermedad degenerativa provoca una parálisis muscular que acaba afectando a todo el cuerpo y termina con el fallecimiento del paciente en pocos meses o años, según los casos, ya que no existe cura actualmente.
Marisa decidió buscar tratamientos alternativos para su padre. Unos amigos les contaron que en Internet anunciaban una clínica en China que aseguraba curar la ELA, a cambio de 18.000 euros, inyectando células madre directamente en la cabeza del enfermo.