El Partido Popular ha dado entrada en el Registro Municipal de una serie de sugerencias al Plan de Diagnóstico sobre la estrategia de movilidad en el conjunto histórico de Ronda, es decir, al polémico caso sucedido hace varias semanas cuando el Gobierno tripartito anuncio que quería reduciría el tráfico de vehículos por calle Armiñán.
La presidenta local, María de la Paz Fernández, antes de entrar de que se pase a la fase de actuación y considerándose que es un documento participativo, denunció que el Plan de diagnóstico no trata sobre el conjunto histórico en su totalidad “por lo que hay que incluir zonas que han quedado fuera de su estudio”.
Otro de los aspectos que el grupo popular considera de vital importancia es la renovación del estudio de de las entradas y salidas de vehículos a Ronda ya que las fuentes últimas datan del año 2011. “Cuando se ponga en servicio el nuevo Hospital, el incremento del tráfico por el Puente Nuevo, calle Armiñán y Barrio de San Francisco será notable, por lo que nuevamente habrá que actualizar los datos”, manifestó Fernández. En ese sentido, también destacó que habrá que conocer la verdadera realidad del Puente Nuevo y qué actuaciones se van a llevar a cabo puesto que necesita un informe técnico “serio” al no existir ninguno que determine cual es su estado actual.
Desde el PP creen necesario incluir en dicho estudio la carretera de acceso a los Molinos del Tajo “que se encuentran en pésimo estado”. En esa larga lista, especifican que dentro del sistema viario del Conjunto Histórico se definen tres puntos de acceso (Ruedo Alameda, Puente Nuevo y Puente Viejo) y no se nombran otros accesos que con toda seguridad tomarán mayor protagonismo en las propuestas de mejora, como son la calle Tomilla, calle Santa Cecilia, camino del Molino de Alarcón, calle Real y otras adyacentes. Tampoco se especifican en esta zona las vías de carácter peatonal.
Otra cuestión que ha llamado la atención del PP, y la cual ha denunciado, es la reiterada referencia que el documento hace a otros planes de diagnóstico realizados hace siete e incluso diez años.
La calidad peatonal en el casco histórico, la señalización, la ausencia de aparcamientos disuasorios en las entradas de la ciudad y la falta de comunicación sobre este proyecto a la ciudadanía, son otras de las carencias detectadas por los populares.
Por ello, el PP propone que en el plan de encuestas, para que este importante proyecto salga del consenso, participen los propios vecinos para alcanzar una posible solución sobre el diagnóstico de los puntos más conflictivos en cuanto a la movilidad de vehículos y peatones.