El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha adjudicado las obras de la tercera y última fase del proyecto de renovación de todo el bloque quirúrgico del hospital Infanta Elena por 1,5 millones de euros, que supondrá, una vez finalice, la remodelación y modernización total del área quirúrgica y su ampliación en más de 500 metros cuadrados, así como un avance fundamental en las condiciones de bioseguridad de la misma.
En total, sumando las tres fases del proyecto, supondrá una inversión de alrededor de 3,1 millones de euros destinadas, fundamentalmente, a la obra civil, han informado a Europa Press desde la Junta de Andalucía.
Esta tercera fase ha sido adjudicada por un importe cercano a los 1,5 millones de euros, una partida ya reservada por el SAS para este ejercicio presupuestario y en ella se contempla la habilitación de cuatro quirófanos, puesto que los otros tres existentes se incluyeron en la segunda fase y se encuentran ya a pleno rendimiento.
Estas nuevas instalaciones permitirán incrementar significativamente la actividad quirúrgica del centro hospitalario, así como la complejidad y dificultad de las intervenciones que pueden realizarse en ellas, contribuyendo a la reducción de los tiempos de espera, aumentando la capacidad quirúrgica del Hospital Infanta Elena y mejorando la atención sanitaria que se ofrece a los ciudadanos.
En esta última fase, además de los quirófanos, se habilitará también un nuevo Hospital de Día Médico, que tendrá una superficie cercana a los 350 metros cuadrados y estará destinado a la realización de pruebas diagnósticas o administración de tratamientos médicos de mayor complejidad que requieren de supervisión hospitalaria.
El proyecto contempla también la construcción de cuatro salas de pruebas funcionales, en las que se llevarán a cabo tanto las endoscopias respiratorias y digestivas, como las pruebas funcionales cardíacas, que permitirán aumentar significativamente la actividad en este ámbito, además de una sala de rehabilitación para pacientes neurológicos.
El mismo incluye también la construcción de varias áreas de organización sanitaria, que permitan una zona de transferencia de pacientes más segura y cómoda, varias zonas de estar para familiares y profesionales, así como una sala de informes y espacios destinados a la actividad administrativa y de servicios generales.
Una vez completado el procedimiento de adjudicación y habiéndose procedido a la firma del contrato con la empresa adjudicataria, el objetivo es iniciar las obras durante el próximo mes de mayo, teniendo en cuenta que el plazo de ejecución es de un año, de forma que puedan ultimarse y ponerse en funcionamiento los nuevos quirófanos lo antes posible, completando de esta manera el proyecto de modernización de las infraestructuras del centro hospitalario, tras la renovación en años anteriores de sus infraestructuras más estratégicas, como la UCI y la Unidad de Urgencias.
Tras la finalización de la primera fase de la obra de quirófano, que supuso la construcción de un área anexa a la fachada del edificio principal y contigua al bloque quirúrgico, se dio inicio a la segunda en la que se actuó directamente sobre tres de los quirófanos, incorporando así las instalaciones del edificio anexo y la superficie de antiguas dependencias y dotando al centro de diferentes áreas de apoyo.
Entre las mismas destaca la nueva sala de reanimación o despertar, mucho más amplia y eficiente, las zonas de antequirófanos para la preparación de los pacientes, la habilitación de zonas de espera y de transferencia de pacientes, así como las áreas de información a familiares, los almacenes de material quirúrgico y los espacios administrativos.
MEJORAR MEDIDAS DE CONTROL
No hay que olvidar que este proyecto, además de ampliar significativamente la superficie del bloque quirúrgico, que pasará de contar con alrededor de 1.100 metros cuadrados a más de 1.700, está permitiendo mejorar también las medidas de control de la bioseguridad, ya que las nuevas instalaciones cuentan con exigentes dispositivos de climatización y filtrado del aire, que incidirán de forma directa en la consecución de las garantías sanitarias para la realización de la actividad quirúrgica de cualquier especialidad.
Las obras fueron diseñadas para poder ejecutarse en varias fases, de forma que se puede compatibilizar el desarrollo de las mismas con la actividad quirúrgica que se lleva a cabo a diario en el Hospital con las mayores garantías de seguridad, eficacia y comodidad para pacientes y profesionales.