La sequía y el viento de levante que viene azotando a la campiña en las últimas semanas han provocado ya “daños irreversibles” para algunos cultivos, fundamentalmente para el trigo duro de siembra temprana, cuya producción puede experimentar una merma que ronda “el 30 ó 40 por ciento”, según el presidente de Asaja-Cádiz, Pedro Gallardo.
El sector mantiene la esperanza de que llueva “algo” para que estas pérdidas no se extiendan también a los trigos de siembra tardía, si bien las previsiones meteorológicas no parece excesivamente favorables.
Pero la ausencia de lluvias y el viento afecta también a otros cultivos, como la vid. No en vano, Asaja desplazó ayer a sus técnicos a las viñas para comprobar la evolución de la cosecha, constatando que el temporal está “incluso arrancando” algunas cepas. Gallardo recordó por otra parte que el verano pasado -caracterizado por el levante- propició una merma de la producción del 30 por ciento, existiendo el riesgo de que se repita una situación similar.
La sequía y el viento están afectando también a los cultivos hortofrutícolas e incluso a los invernaderos, donde “seguramente se produzcan daños estructurales”. El presidente de Asaja-Cádiz también advirtió de que el levante “está pegando una paliza importante” a cultivos tradicionales como el girasol. Los pastos también están echando en falta la lluvia, expresando Pedro Gallardo su convencimiento de que faltará alimento para el ganado en algunas zonas. El estado actual de los pantanos también lleva a pensar que “faltará agua” para los cultivos.