Desde hace casi 70 años -los cumplirá en 2018- Jerez celebra públicamente el nacimiento del nuevo mosto, convertido en fin e inicio de todo: colofón a la recogida de la uva y alumbramiento de los nuevos vinos. Lo hace con las denominadas Fiestas de la Vendimia, que fueron a su vez Feria hasta los primeros años ochenta del siglo pasado; fecha desde la que ha buscado una reinvención que se ha caracterizado en los últimos años por los vínculos culturales y turísticos del mundo del vino con la ciudad.
El recuerdo prevalece con la ceremonia inaugural de las Fiestas, la Pisa de la Uva en el reducto de la Catedral, pero también permanece como inspiración: si desde mediados de los años cincuenta cada cita estuvo dedicada a un país de referencia dentro del mercado exportador de los vinos, el Ayuntamiento ha decidido este año retomar los homenajes, aunque en este caso incorporando a las ciudades del Marco, la primera de ellas, El Puerto de Santa María.
El acto de la Pisa de la Uva es “la gran ceremonia del jerez y de Jerez, ésa que inaugura simbólicamente su ciclo vital. Como cada año, Jerez se impregna del nuevo mosto que nutre su identidad y renueva su condición milenaria de gran ciudad del vino”, resaltaba la alcaldesa, Mamen Sánchez, en el acto inaugural de las Fiestas. “La vendimia es el colofón final, la última estación, la consecuencia de todo un año de trabajo y esfuerzo. Es el premio”, al tiempo que marca el reinicio de un nuevo ciclo: “Llegará el otoño, y habrá que realizar el aserpiado de esas lomas que dibujan nuestro horizonte, abonar esa tierra albariza; y luego esperar hasta que el frío nos permita la poda, y después el injerto y la castra, y seguir cuidando y arando la tierra, y ver cómo crece el fruto, y aguardar a la llegada del verano que madura las uvas... Y así año tras año, reproduciendo un ciclo que es el de la propia vida”.
A ese latido vital, y a la de la conmemoración del nacimiento del nuevo mosto, se aferran estas nuevas Fiestas de la Vendimia, y no sólo a través del compromiso con la historia, con la tradición y con la relevancia del sector vitivinícola en Jerez, sino coincidiendo a su vez con el auge que los jereces están adquiriendo en todo el mundo, recuperando posiciones con fuerza en los mercados y recobrando la pujanza de otros momentos. “Este renacer, más allá del simbolismo que tiene, se refrenda también en el de nuestras empresas bodegueras y de la propia ciudad”, recalcaba la alcaldesa.
“El jerez está viviendo un momento dulce y muy especial. Seguramente nunca alcanzará a representar el 10% de todas las exportaciones del conjunto de España, como lo hizo a mediado del siglo XIX, pero hay algo indudable y es que ha revitalizado su valor inmaterial; un valor difícil de cuantificar, que es el que aporta como uno de los atributos de las marcas Jerez, Andalucía y España en los planos gastronómico, cultural y turístico”, y es en estos ámbitos en los que las Fiestas vienen depositando el mayor esfuerzo durante los últimos años.
“Lo importante de esta recuperación que percibimos es que el sector ha interiorizado que el vino de Jerez es una referencia de calidad y que debe reforzar esa etiqueta; y que, más allá del producto en sí, hay toda una cultura detrás que debemos proteger, mimar y divulgar”, resaltaba Mamen Sánchez. “Hay una cuestión relevante y es que ahora, más que nunca, el vino de Jerez - y cuando hablo de Jerez, como territorio del vino, también estoy pensando, lógicamente, en Sanlúcar y El Puerto- es considerado más que nunca como un lujo para el paladar; que su implantación como elemento indispensable de la gastronomía española y de la nueva cocina crece de manera exponencial, y que hemos conseguido que una mayoría de consumidores sientan que beber vino de Jerez no es un mero acto social, o un simple acompañamiento al aperitivo o la comida. Hemos profundizado en los valores del nuestro vinos y quien degusta una copa de fino, un amontillado, un oloroso, un palo cortado, un Pedro Ximénez, o un Brandy de Jerez, siente que está viviendo una experiencia única e irrepetible”.
Desde el Ayuntamiento, entre otras iniciativas, como la de las Fiestas de la Vendimia, están empeñados en cuidar de ese “tesoro inmenso que tenemos, cuidemos de esa arquitectura que hasta los años 70-80 del siglo pasado configuraba el perfil urbano de la ciudad y, además, contribuía al dinamismo de nuestro centro histórico. Es verdad que muchas de esas extraordinarias edificaciones se reciclaron para otros usos culturales o comerciales, pero también que el centro de Jerez, con la construcción de modernas bodegas en la periferia, perdió su aroma característico. Por eso, saludamos con alegría que proliferen modestos negocios familiares en torno al vino, dándole uso a muchos cascos de bodegas que se conservan en el Jerez intramuros y en los arrabales de Santiago y San Miguel”.
En este sentido, en Jerez se está viviendo un renacido interés por recuperar las tradiciones de la vendimia, como el asoleamiento de las uvas, pero también por poner en valor la riqueza patrimonial y el atractivo enoturístico de los viñedos jerezanos. Hoy, que se busca mucho en el turismo vivir experiencias y sensaciones nuevas, este calendario festivo pone a su disposición la oportunidad de conocer, por ejemplo, la vendimia nocturna, así como la riqueza de los viñedos, junto a otras muchas experiencias y sensaciones vividas directamente en las viñas: desde desayunar o ver puestas de sol en las mismas, hasta practicar yoga o hacer recorridos culminados con maridajes.
Lejos de las viñas, pero en pleno corazón de la ciudad, también se suceden otra serie de actividades, siempre ligadas al mundo del vino, y en escenarios históricos y patrimoniales tan relevantes como los Claustros de Santo Domingo o el propio Alcázar, en los que se desarrollan, respectivamente, el ciclo De Copa en Copa y las Catas Magistrales.
El marco incomparable de Los Claustros vuelven a acoger la exposición y muestra de vinos de Jerez De Copa en Copa, en la que se da la posibilidad a los visitantes de degustar los mismos en los diferentes stands con entrada gratuita hasta completar aforo.
El visitante interesado podrá adquirir la copa de cata al precio de dos euros, mientras que las degustaciones de vino costarán un euro y las de vinos VOS, con más de 20 años, y de vinos VORS, con más de 30 años, tendrán un precio de 3 euros. También se pueden adquirir bonos de 6 degustaciones a un precio de 5 euros y de vinos VOS y VORS, 2 degustaciones a un precio de 5 euros.
Los horarios para esta exposición son el viernes, 8 de septiembre, de 20.30 a 23 horas y el sábado, 9 de septiembre, de 12.30 a 15.30 y de 20.30 a 23 horas.
Por su parte, el Patio de Armas del Alcázar volverá a ser el escenario perfecto para el desarrollo de una nueva edición de las Catas Magistrales, un encuentro anual en torno a los vinos de Jerez y a sus múltiples posibilidades de maridaje con la mejor cocina de nuestra zona.
Las Catas tendrán lugar del 7 al 9 y del 13 al 16 de septiembre, a partir de las 20.30 horas. El precio es de 30 euros y las reservas se pueden realizar al teléfono 680 168 569. En esta edición participan bodegas tan prestigiosas como Grupo Estévez, González Byass, Díez Mérito, Lustau, Williams&Humbert, Sánchez Romate y Fundador, que maridarán sus vinos con Gourmet Cobos Catering.
El calendario festivo, que se prolonga hasta el 17 de septiembre, incluye asimismo rutas guiadas por el Jerez del Vino que culminan con la visita a una bodega del centro; catas de maridaje de vinos de Jerez con jamones de Jabugo; la posibilidad de participar de una pequeña vendimia en familia, que incluye asimismo la pisa de la uva; catas sensoriales; winebrunchs organizados por Bodegas Tío Pepe; sesiones de yoga entre viñas; exposiciones fotográficas; conferencias; sesiones de coctelería con vinos y brandis de Jerez; visitas al yacimiento de Doña Blanca; un laboratorio de maridajes; e incluso espectáculos ecuestres, con motivo de la celebración del Día Europeo del Caballo. Una suma de experiencias con las que Jerez pone de relieve un año más la trascendencia vital del vino en su día a día.
El Puerto, primera ciudad homenajeada
Las Fiestas de la Vendimia de Jerez se dedicaron en su momento, cada año, a un país. El Ayuntamiento ha retomado este año dicha idea, pero rindiendo honores a ciudades del entorno. La primera de ellas es El Puerto de Santa María, inaugurando de esta forma una iniciativa que se pretende prolongar en los años sucesivos dedicando la cita a otras poblaciones del Marco de Jerez. “Nuestro objetivo con esta propuesta es generar sinergias y estrechar aún más los lazos que nos unen con las ciudades que componen el Marco del jerez, que queremos que se sientan plenamente identificados con estas Fiestas”, ha defendido el delegado de Dinamización Cultural, Francisco Camas. “No podemos olvidar las verdaderas raíces de este ciclo festivo, que es festejar el nacimiento del nuevo mosto que da paso al jerez, uno de los mejores caldos del mundo y una de las principales señas de identidad de nuestra ciudad”, recalca. Para ello, las Fiestas han contado con la presencia de representantes de las bodegas portuenses y de las instituciones de la localidad de la Bahía en las diversas actividades que se van a desarrollar durante el programa de actos.
Rutas en 4x4 por los viñedos y visitas-maridaje
Dentro del calendario festivo se incluyen actividades como las Rutas 4x4 por las viñas del Marco de Jerez. Esta actividad se celebra hasta el 15 de septiembre en horario de mañana, pero también se oferta una ruta de 17.30 a 21 horas para poder contemplar la puesta de sol. El lugar de encuentro es la plaza del Arenal y la información y las reservas se pueden hacer a los teléfonos 610 962 155 o 956 339 053. Por su parte, la Bodega Viña La Constancia organiza también un ciclo de Visita+Maridaje de Vinos & Chocolate, que tendrá lugar los días 8 y 15 de septiembre, a las 12 horas, y en el que se podrá disfrutar de un paseo por los viñedos, conocer la elaboración de los vinos y disfrutar de un maridaje de vinos y chocolates en el interior de la bodega. Las reservas se pueden realizar en el teléfono 620 055 771. Esta misma bodega ofrece también la experiencia Visita+Maridaje de Vinos & Quesos, los días 8 y 15 de septiembre, a las 12 horas.