Desde joven supo que tenía algo que lo haría triunfar en el complicado mundo de la música. Creyó en su capacidad, confió en él y se lanzó a la aventura de salir fuera de Jaén, llegando a Madrid y más tarde a México. Hoy es uno de los grandes de la música española y latinoamericana, un cantante, compositor y productor musical que ya sólo por su apellido ha llevado el nombre de Jaén por todo el mundo.
Alejandro Jaén Palacios (Villargordo, 1949) recibirá el próximo 19 de diciembre la Medalla de Oro de Jaén y el título de Hijo Predilecto de la Ciudad, en una gala en el Teatro Infanta Leonor, que será una fiesta de la música. “Jaén es mi tierra y este reconocimiento es el más extraordinario de toda mi carrera”, dice quien acaba de entrar en el salón de la fama de los compositores latinos. “Será un reconocimiento entrañable y compartiré ese momento con artistas españoles y latinoamericanos, a los que invitaré para que estén conmigo en el escenario”, avanza. “Quienes me conocen verán que se reconoce a un hombre que salió de Jaén para cumplir su sueño y que lo ha conseguido”, dice emocionado.
Hijo de Guardia Civil, el cuartel de Jaén fue su casa desde pequeño y hasta que decidió apostar por la música y marcharse para hacer carrera. “Todo lo que sé de la música lo aprendí en Jaén, con las orquestas que tocaban en las bodas e incluso con las bandas de música de Semana Santa”, recuerda.
Tenía 16 años y una banda de Brasil lo quiso ‘fichar’, pero su familia no lo dejó. “Cuando cumplí la mayoría de edad enfoqué mi vida a la música. En la década de los 70 era una aventura irte a Madrid, pero no lo dudé”, asegura. Y se fue con su banda jienense, la recordada ‘Moby Dick’, como cantante y bajista. “En la música el sacrificio es una constante, pero si te apasiona y lo enfocas todo a ella, la recompensa es haber vivido durante cincuenta años de la música, mi pasión”, valora el cantante.
En 1978 sacó su primer disco en solitario, justo un año antes de llegar a América. Luego, su canción ‘Acaríciame’ fue un éxito en México y este país fue su trampolín. “México me cambió la vida como cantante, compositor y productor musical. Los cantantes más famosos del país me pedían canciones.
En España empezaba a destacar, pero México supuso un gran espaldarazo a mi carrera”, asegura quien hoy lamenta la catástrofe natural que ha sufrido el país.
Sin embargo, su meta era Los Ángeles y ha hecho de Miami su lugar de residencia, una ciudad musicalmente estratégica. Ha desarrollado una brillante carrera como compositor. Más de 1.000 canciones suyas han sido grabadas en todo el mundo. Tiene más de 50 discos de oro y platino por las más de 50 millones de copias vendidas de sus obras.
Todo ello avala su prestigio como uno de los compositores más importantes de habla hispana. “La música ha sido lo más grande que me ha pasado, una bendición”, puntualiza un hombre que ha sido constante y se sigue esforzando. “Nunca me jubilaré de componer. Tengo la ilusión de seguir haciendo cosas”, reconoce.
Y aunque el acento lo ha perdido, lo que no ha dejado atrás son las ganas de Jaén. Lleva 37 años fuera de la ciudad y no hay día que no recuerde su Jaén, a la que acude cada año. “Me estoy planteando pasar más temporadas aquí y empaparme de la movida musical de la ciudad”, dice.
Hombre extremadamente sencillo, Alejandro Jaén reconoce que “hay que arriesgar para ganar, tener fe e insistir”, recomendando esta actitud a quienes luchan por un hueco en la música. “Te tienes que acostar soñando y levantarte con un sueño que cumplir”, recomienda quien agradece el apoyo de quienes confiaron en él para ser hoy un artista único, con ocho nominaciones a los Grammy Latinos. “En mi creyó mucha gente, pero tienes que creer en ti mismo y ser osado”, asegura.
Como productor musical, Alejandro Jaén confía en la gente joven con talento. “No es fácil mantenerse, pero un secreto es trabajar con jóvenes con talento”. De hecho, sigue dejando huella en la música escribiendo para nuevos talentos y artistas establecidos. “He trabajado con artistas que nunca soñé, los podría contar por miles y eso ha sido un regalo”, termina este jienense reconocido internacionalmente.
