No se cumplió el tópico para el Real Jaén en su visita al Atlético Malagueño. “Entrenador nuevo, victoria segura”, dicen, pero ni el debut de Salva Ballesta en el banquillo de los jiennenses en su regreso a la que fue su casa, pudo evitar el triunfo, ¡octavo consecutivo!, del filial blanquiazul, líder indiscutible del Grupo IX de Tercera División. La derrota, por la mínima, llegó en el tramo final y por culpa de un penalti que transformó Jaime Moreno. Hasta ese momento el Jaén peleó por ganar.
Se esperaba Salva Ballesta un complicado estreno como técnico del Real Jaén y así fue. El Atlético Malagueño, exequipo del flamante técnico blanco, llegaba al encuentro de ayer conociendo únicamente victorias. Con el casillero de empates y derrotas inmaculado porque hasta la fecha, nadie ha conseguido toserle. La misión del Jaén, a domicilio, era de todo menos sencilla. Y al líder no le hizo falta hacer un grandísimo partido para llevarse, de nuevo, los tres puntos.
Tras dos victorias consecutivas con David Rojas Díaz, ‘Valenciano’, predecesor de Salva, la racha se fue al traste en los Campos de la Federación. Un escenario donde el filial blanquiazul se siente imparable y en el que el Real Jaén, pese a poner todo de su parte, fue incapaz de conseguir un punto. Eso sí, estuvo cerca de conseguirlo, pero al final se impuso la lógica y los de Manuel Ruano, tras un primer tiempo más bien discreto, golpearon en la recta final.
Y es que en la primera mitad apenas hubo grandes ocasiones ni fútbol brillante por ninguna de las dos partes. Aunque eran los de casa quienes debían llevar la iniciativa, el Jaén no se amilanó en ningún momento y trató de encontrarle las cosquillas al rival, que supo hacer una buena lectura del encuentro y esperar al momento perfecto para asestar su golpe definitivo. Jack Harper, a los dos minutos, tuvo una de las primeras aproximaciones al área visitante.
La primera clara de los de Salva tuvo lugar a los diez minutos, con un remate de Pico tras un gran centro de Cervera que se marchó cerca del palo. Pese al buen hacer en la retaguardia de los lagartos, el Atlético Malagueño buscaba los huecos y de nuevo Harper, en sendas ocasiones, trataba de superar sin éxito la portería defendida por Emilio Muñoz. El Jaén, sin prisa pero sin pausa, puso la réplica de la mano de Migue Montes, que pudo lograr el 0-1 con un magnífico testarazo.
El propio ‘9’ junto a Cervera dispusieron a falta de tres minutos para el final del primer acto de otra doble oportunidad para superar a Samu Casado, pero de nuevo el balón se negó a superar la línea de gol. El Jaén, durante los primeros 45 minutos, demostró muy buen hacer en la mayoría de las facetas, siendo seguramente la ofensiva la que más tenga que trabajar en las próximas semanas Salva. Sin la salsa del fútbol no hay victorias.
Al descanso se llegó con dos roscos en el marcador pero con todo por decidir. Un partido abierto donde los haya en el que la victoria, pese al favoritismo local, no estaba clara. ¿Sería el Jaén el primer equipo en frenar al imparable Malagueño? Lo cierto es que durante los primeros compases de este segundo capítulo ni uno ni otro contendiente apostó firmemente por ir a por la victoria, si bien los malacitanos ofrecían la sensación de tener la sartén por el mango.
Segundo tiempo
Con el transcurrir de los minutos, los de casa imprimieron más intensidad al duelo y comenzaron a crear peligro en el área blanca. Sin embargo, por parte del Jaén, Rivera primero e Ismael después pudieron poner dejar helado al respetable si no hubiesen marrado las ocasiones que tuvieron en el 67’, preámbulo además del penalti que acabaría por decidir el encuentro, apenas unos segundos después. Poco antes, ya había reclamado la hinchada local una pena máxima que no se le concedió. Esta vez no hubo discusión y el colegiado castigó una mano dentro del área de Ismael, provocado tras un gran contraataque con Jaime Moreno de protagonista. El propio atacante blanquiazul no perdonó desde los once metros para colocar el 1-0 en el electrónico. Era el minuto 69 y el Jaén tenía por delante poco más de 20 minutos para conseguir lo que hasta ahora es un imposible, rascar algo positivo de un duelo ante el Atlético Malagueño.
Los hombres de Salva, a partir de ahí, embotellaron a su rival, al que pusieron contra las cuerdas en más de una ocasión con constantes llegadas. También reclamaron un penalti y Heredia, de cabeza, hizo intervenir de manera magistral a Samu Casado para evitar la igualada en la que probablemente fue la oportunidad más clara. Al final, el filial malacitano aguantó el tipo, trató de sorprender a la contra y, a fin de cuentas, se llevó la victoria, la octava en ocho jornadas, la que desmontó el tópico a Salva.