“De los 74 pequeños que este año han recalado en el Campo de Gibraltar, 21 de ellos son acogidos durante los meses de verano por familias de la ciudad”, según aseguró a este diario Bandrés.
Después de Algeciras, “la pedanía barreña de Palmones está volcada con nuestra causa y es la zona que más niños recibe cada año, mientras que La Línea ha bajado mucho este año”.
El problema, según la coordinadora, “radica en poder pagar los desplazamientos de los pequeños, porque las ayudas son muy cortitas, tanto que podríamos decir que son casi nulas”.
No obstante, “el número de niños se mantiene prácticamente estable, trabajo que se inicia en el mes de octubre”. En cuanto a la recepción de ayer, Isabel Bandrés destacó “la solemnidad de dicho acto, puesto que es el reconocimiento de un Ayuntamiento a la problemática que viven los saharauis”.
Hermanados
Por tanto, según aseveró la coordinadora del programa Vacaciones en Paz, “para nosotros, que los alcaldes reciban a los niños es fundamental, dado que todos los ayuntamientos están hermanados con los saharauis, aunque luego, en la práctica, ese hermanamiento deja mucho que desear”.
A lo largo de la recepción de ayer, Herrera departió con los pequeños y sus familias de acogida.
Por su parte, los niños hicieron entrega al alcalde de un obsequio y ellos también recibieron unos recuerdos municipales. Dentro de la decimoséptima edición del programa, cabe destacar que, a mediados del próximo mes de agosto, los pequeños comenzarán a regresar a los campamentos de refugiados, que se encuentran situados en la zona argelina de Tinduf.
Herrera señaló que “es una satisfacción personal y como alcalde compartir con ellos este rato”.
“Muchos de nosotros hemos de aprender tanto de las familias de acogida como de todos quienes trabajan en beneficio de esta causa”, añadió, al tiempo que anunció que en febrero del próximo año visitará los campamentos de refugiados para conocer personalmente la situación de estas personas”.