De esta forma, las concejales del PP Juana Cid y Paula Jaén critican que, “tras un mes desde que entró en funcionamiento la nueva flota de autobuses, el servicio que se presta sigue siendo deficitario y continúan las quejas de los usuarios”.
Desde las filas populares se subraya que “los autobuses siguen sin cumplir sus horarios en las distintas líneas y hay muchas veces que ni siquiera pasan por las paradas con el consiguiente perjuicio para los algecireños que, por ejemplo, utilizan el autobús para llegar a sus puestos de trabajo”.
Es las, las ediles populares mantienen que “hay líneas en las cuáles antes pasaban los vehículos cada media hora y ahora hay un intervalo de una hora entre los autobuses”.
Todo esto lleva al PP a asegurar que “está claro que hay una descoordinación manifiesta en el servicio ya que hay zonas, como La Piñera, en que las paradas están demasiado próximas entre sí y donde realmente hace falta no paran. Además muchas paradas aún no tienen ni siquiera marquesinas”.
Tanto Cid como Jaén destacan que “cuando se inauguraron las nuevas líneas, el concejal delegado de Movilidad Urbana, Javier Soto, reconoció que había que realizar un esfuerzo en materia de información tanto a los usuarios como a los conductores”.
Sin embargo, para los populares “a día de hoy los algecireños continúan sin conocer los horarios de las líneas y los recorridos. Y lo que es peor, hay conductores que tampoco tienen esa información”.
Ante esta situación, el Partido Popular lamenta que, “después de esperar casi dos años” desde que se anunció la renovación de las líneas, “el servicio sigue funcionando igual de mal que antes”. En esta línea, las ediles se preguntan si ésta es la manera que tiene el equipo de Gobierno municipal de fomentar el transporte público en la ciudad e incrementar el número de usuarios.
Como conclusión, desde las filas populares se incide en que “al final, uno de los proyectos estrella de este equipo de Gobierno, se va a convertir en un nuevo fiasco si no se perfecciona el servicio de autobuses”.
Ficus perdido
Por otro lado, los también ediles populares Diego González de la Torre y Bernabé Ramírez deploraron que “de nuevo un símbolo emblemático de la ciudad como era el ficus centenario que hasta ahora ocupaba el centro del patio del edificio de la Fundación José Luis Cano haya desaparecido”.
Para los concejales, “la dejadez de este Gobierno ha tenido de nuevo graves consecuencias. Parece ser que la falta de los cuidados más primarios, como son el riego y la poda, podría ser la causa principal de la desaparición de esta robusta planta con más de trescientos años de existencia”.
