El año ha comenzado en Torremolinos con la bienvenida a la mayor transformación urbanística que ha vivido la ciudad desde los años 60.
El pasado lunes dieron comienzo, de forma simultánea, las obras de peatonalización de la plaza Costa del Sol, así como los trabajos para mejorar la accesibilidad en la Cuesta del Tajo y calle Peligro, trabajos que se prolongarán hasta el mes de julio del presente año. Las actuaciones mejorarán la calidad del tránsito peatonal por este nudo de enlace entre el paseo marítimo de El Bajondillo y el centro urbano.
El proyecto comprende el levantamiento del suelo, la acometida de nuevos servicios, saneamiento e infraestructuras y la sustitución de toda la solería por un empedrado artesanal antideslizante que salvará el desnivel de la Cuesta del Tajo con rampas más suaves y escalones más accesibles. El objetivo de esta actuación simultánea es crear un centro atractivo de manos de la nueva plaza Costa del Sol para motivar al turista a que suba desde la playa y pueda hacerlo por un entorno accesible a través la Cuesta del Tajo.
La primera teniente de alcalde, Maribel Tocón, mantuvo una reunión con los comerciantes de la zona el pasado 29 de diciembre con el objetivo de informarles sobre los trabajos que se realizan. “Por fin vamos a comenzar la transformación de esta zona vital para nuestra municipio tras vuestras demandas ante las lamentables condiciones de accesibilidad, que impide que los turistas que van a la playa puedan subir al centro”, manifestó Tocón.
La obra ha comenzado por la zona de calle Bajondillo y en una segunda fase se acometerán los trabajos de la Cuesta del Tajo, que finalizarán aproximadamente en mayo. A partir de entonces, se dotará la zona de nuevo mobiliario urbano. Además, los trabajos se irán finalizando por tramos para generar los menores inconvenientes posibles a los comerciantes y residentes. Tocón finalizó su intervención ante los comerciantes de la zona asegurando que la “hoja de ruta para la transformación de nuestro casco histórico está clara, lo primero era crear un centro atractivo para motivar que el turista suba desde la playa de manos de la peatonalización de la plaza Costa del Sol”. Y después, “hacerlo accesible para facilitar que el turista pueda subir desde la playa”, lo que va a conseguir que ese millón de turistas que nos visitan cada año, se quede y consuma en nuestro municipio”.
El resultado de estas dos grandes actuaciones será un “centro renovado, bonito, atractivo y accesible”. En cuanto a los trabajos en la plaza Costa del Sol, se prolongarán hasta el mes de diciembre de 2018. Este proyecto de peatonalización de la céntrica plaza y la avenida Palma de Mallorca hasta su conexión con la avenida Isabel Manoja, supondrá una inversión de 2,5 millones de euros. Esta obra se ejectutará en dos fases. La primera de ellas, que durará hasta el mes de mayo, solo se interrumpirá con motivo de la celebración de Semana Santa.
