La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha alertado este miércoles de que las amenazas hoy en día no están "a la vuelta de la esquina", sino hay que combatirlas allí donde se generan para garantizar la seguridad y la libertad de los españoles.
Por ello, ha agradecido la labor que realizan los militares desplegados en operaciones en el exterior; como los que participan en la misión de la Unión Europea en Malí, a los que ha visitado este miércoles coincidiendo con la toma de posesión de España como mando de la operación.
"Están ayudando a las fuerzas armadas malienses a que puedan luchar contra aquellos que quieren hacer del país pasto del terrorismo, la criminalidad y una tierra sin esperanza y sin futuro", ha agradecido acompañada por el general español que desde este miércoles dirigirá la misión, el general de brigada Enrique Millán Martínez.
Cospedal ha subrayado que las misiones internacionales contribuyen a preservar "la soberanía y la integridad" españolas y a defender los derechos de sus ciudadanos. "Porque sin seguridad no hay libertad ni una vida plena", ha remarcado.
La ministra ha llegado a Bamako procedente de Gabón, donde ha visitado a los militares que desde allí dan apoyo a la misión que Francia desarrolla en República Centroafricana. Y ha tenido que suspender una escala intermedia en Senegal por problemas mecánicos del avión en el que viajaba.
En el cuartel general de la EUTM-Malí ha agradecido a los militares el "sacrificio" que realizan lejos de sus familias para proteger al resto de los españoles. "Tan lejos de nuestras fronteras pero tan cerca del corazón de los españoles", ha remarcado.
Y ha asegurado que España está "especialmente interesada" en contribuir a la estabilidad de Malí y todo el Sahel. En una comparecencia parlamentaria la pasada semana, Cospedal ya reconoció que la situación es "más conflictiva" que hace unos meses porque están "resurgiendo" los ataques y eso hace que la presencia internacional tenga que ser mayor.
La misión va ya por su tercer mandato y está previsto que en el mes de mayo se amplíe a un cuarto. Mientras que las dos primeras fases estuvieron centradas en ayudar al Gobierno del país a reconstruir su ejército, la tercera puso ya el foco en el adiestramiento de los militares y la cuarta tendrá el objetivo de dotarles de capacidades propias para reestructurar sus fuerzas armadas y ser autónomos en la formación de los nuevos soldados.
Esto hace que la labor del contingente adquiera mayor "complejidad", según ha reconocido Cospedal, que ha pedido a los militares que se protejan y garanticen su seguridad. Este adiestramiento "descentralizado" llevará a las tropas a nuevos escenarios en zonas del país más próximas al conflicto.
Coincidiendo con el liderazgo de la misión, España ampliará sus efectivos desde los 140 actuales hasta un total de 292. Este aumento se debe a que, además del mando, las Fuerzas Armadas españolas se harán cargo también este año de la denominada fuerza de protección, dedicada a la seguridad de los militares desplazados.
El general Millán explicó este martes que el objetivo de la misión es dotar a los malienses de las capacidades que les permitan recuperar la estabilidad del país, sin participar en acciones directas de combate ni facilitándoles armas u otro tipo de material de guerra.
Según explicó el general Millán, una de las causas del incremento del terrorismo en Malí es su decadencia en Siria o Irak, de donde huyen los terroristas para buscar refugio en los países del Sahel. Además, entrelazan sus redes con grupos de tráfico de drogas, personas o mercancías para beneficiarse mutuamente.
La misión de la Unión Europea nació en el año 2013 después de la inestabilidad en la que quedó sumido el país tras la rebelión tuareg de 2012, un posterior golpe de estado militar y la entrada del terrorismo yihadista en su territorio. A una operación inicial de Francia le siguió la misión de la Unión Europea en la que participan casi 600 efectivos de 27 países.
EUTM Malí no es una misión ejecutiva, lo que quiere decir que los militares desplegados ni participan en acciones de combate ni acompañan a las unidades malienses en sus operaciones. El objetivo es el adiestramiento, ahora ya enfocado en que las fuerzas armadas del país asuman progresivamente la responsabilidad de su educación militar y desarrollen su propio sistema de instrucción.
Actualmente, la mayor parte de la fuerza y de los militares españoles están ubicados en el centro de entrenamiento de Koulikoro, situado a 60 kilómetros al noreste de Bamako. Durante los últimos años, más de 11.500 soldados han sido entrenados por la misión, lo que representa aproximadamente un tercio del ejército maliense.
Con el fin de promover la transición hacia una capacidad de entrenamiento autónoma, EUTM centrará sus actividades en la denominada 'formación de formadores' dirigida a los mandos de sus fuerzas armadas en las regiones militares, las academias militares malienses o en el propio centro de instrucción de Koulikoro.
