Unicaja ganó este jueves al Maccabi Tel Aviv por 83-69 en una nueva jornada de Euroliga donde completó una gran segunda parte. El parcial de 0-7 con el que arrancó el encuentro fue un reflejo de un Maccabi muy acertado, orquestado por Michael Roll.
El equipo local supo reencontrarse y James Augustine, Nemanja Nedovic y Jeff Brooks pusieron las tablas en el marcador (13-13). La dinámica sobre el parqué cambió y los malagueños se afianzaron mandando en el luminoso gracias a una mejor circulación de balón y un mayor acierto.
Alberto Díaz entraba en acción también en el apartado anotador. Seguían siendo importantes los jugadores interiores cajistas y Giorgi Shermadini entró a la cancha para empezar a sumar bajo el aro. DeAndre Kane frenó el parcial de 6-0 y Unicaja cerró el periodo con una gran jugada de pizarra para seguir comandando en el resultado (23-19).
Una gran asistencia de John Dibartolomeo estrenó el segundo cuarto; la réplica fue de un efectivo Shermadini en el aro contrario. Deshaun Thomas dio la vuelta al marcador con un triple desde la esquina. Maccabi volvía a llevar el ritmo en el partido, mientras que Unicaja empezó a zozobrar en ataque, lo que aprovecharon los visitantes para distanciarse. Entonces apareció el capitán. Carlos Suárez, con un triple, volvía a dar oxígeno a los suyos.
El parcial de 7-15 hizo que Plaza parara el partido con un tiempo muerto. Pierre Jackson jugaba a su antojo y los cajistas seguían perdiendo balones. Aún así, Ray McCallum sumó con una gran penetración y dejaba a una canasta la diferencia entre ambos conjuntos. Finalizaban con dificultad los contraataques los cajistas, a diferencia de los de Neven Spahija que aprovechaban cada transición para anotar con facilidad. La velocidad en el juego la aprovechó McCallum haciendo gala de su potencia.
Nedovic volvió a poner por delante a Unicaja antes del descanso (42-41) y deleitó en el tercer cuarto con un tapón impresionante. Pierre Jackson anotaba para arrancar la segunda mitad e inclinar el resultado a favor de su equipo. A la tercera sumó Brooks para los locales.
La igualdad brillaba en el Carpena con un Unicaja que no aprovechaba los tiros libres. Nedovic puso de pie a la afición con un triple muy lejano. Era la misma distancia desde la que entraba en acción Milosavljevic. Unicaja empezó a mostrar una confianza que se tornó en efectividad y la ventaja aumentaba (60-55). En el último cuarto los cajistas abrieron brecha de 10 puntos.
La máquina malagueña estaba engrasada y se reflejó en un contraataque de libro con un gran pase de McCallum a Waczynski. Hasta Viny Okouo anotó un punto para cerrar una importante victoria local.