La Guardia Civil mantiene como hipótesis principal que el disparo del arma reglamentaria de un policía local de Granada, de 52 años, que hirió de gravedad a una mujer de 42 años, en una vivienda de Huétor Vega este pasado miércoles, fue fortuito. Está previsto que el agente, que permanece detenido, pase a disposición judicial este próximo viernes.
Así lo han indicado a Europa Press fuentes del Instituto Armado, que prosigue las diligencias previstas para conocer las causas y circunstancias que rodean este suceso en el que, en cualquier caso, se mantienen todas las hipótesis abiertas.
La Policía Judicial de la Guardia Civil dirige la investigación hasta que el agente, que permanece en dependencias de la Comandancia de la Benemérita en Granada, sea trasladado ante el juez que estaba de guardia en el momento de los hechos, lo cual está previsto en un principio para este próximo viernes.
Los hechos ocurrieron sobre las 18,30 horas en una vivienda del municipio del área metropolitana de Granada, en la que, según el testimonio del investigado, habría disparado de forma fortuita su arma cuando realizaba labores de limpieza de la misma, impactando la bala contra el estómago de la mujer, que es su amiga, siempre conforme a lo que ha indicado el detenido a los investigadores.
La investigación está pendiente de que se pueda tomar declaración a la mujer herida, si bien los primeros datos que han trascendido no apuntan a que estas personas estuvieran discutiendo en el momento de los hechos, agregaron las fuentes, que apuntaron a que él podría haber incurrido en un posible delito de lesiones por imprudencia.
Por otro lado, fuentes oficiales de Salud consultadas por Europa Press han precisado que la mujer sigue ingresada muy grave en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital del Campus de la Salud de Granada, después de ser intervenida de urgencia este pasado miércoles por la noche de las heridas producidas por la bala, que le produjo un orificio de entrada y salida.