La recuperación del mercado de trabajo en los tres últimos años no ha conseguido cerrar las profundas heridas de la dilatada crisis y de la fuerte devaluación laboral sufrida. Un tercio de la ciudadanía vive en riesgo de exclusión social, casi 1,2 millones de hogares se encuentra con todos sus miembros en el paro y más 650.000 familias no tienen ningún ingreso. Estas cifras dibujan un país que tiene unos niveles de pobreza e índices de desigualdad salarial de los más altos de la Unión Europea.
Por eso, en este 1º de mayo el sindicato CSIF sigue insistiendo y reclamando que “la verdadera recuperación llegue a todos los ciudadanos. La distribución justa de la riqueza debe llegar a pensionistas, empleados públicos y trabajadores en general”.
La crisis económica ha deteriorado asimismo los servicios públicos: la educación, la sanidad, la justicia, la administración, la seguridad… pilares de la sociedad del bienestar; la prestación de estos servicios ha permitido garantizar los derechos de los ciudadanos gracias a los esfuerzos de los empleados públicos, a pesar de que durante todos estos años han sufrido todo tipo de recortes en sus salarios y en sus condiciones laborales. Normativa CSIF se propone como objetivo que “los ciudadanos de nuestro país recuperen la posición que merecen en el estado de bienestar y de justicia social. Para ello debemos superar el obstáculo que supone la obsoleta normativa sindical, recuperando una verdadera negociación colectiva que nos lleve a acuerdos, que permitan avanzar en la recuperación salarial y de condiciones laborales”. CSIF ha centrado sus esfuerzos en alcanzar la recuperación en su ámbito de influencia, las Administraciones Públicas.
De esta forma, consiguió firmar el II Acuerdo para la mejora del empleo público y de condiciones de trabajo, el pasado 9 de marzo. “Con este acuerdo, iniciaremos levemente la senda de recuperación del poder adquisitivo perdido de los empleados públicos en la última década, se creará empleo neto por primera vez después de muchos años y se recupera la negociación colectiva de una parte importante de los derechos sustraídos con la crisis.
Por ello, exigimos su aplicación ágil por los distintos ámbitos de negociación para no dilatar por más tiempo su implantación”. De igual modo, en este 1º de mayo CSIF recuerda situación de los pensionistas españoles y de “la ridícula revalorización del 0,25 de las pensiones. Sois, una vez más, ejemplo de lucha reivindicativa tomando la calle en defensa de vuestros derechos. Os acompañamos en la recuperación de unas pensiones dignas, fruto de tantos años de esfuerzo y trabajo y sin merma de poder adquisitivo”. Tejido productivo CSIF también insiste en las dificultades del tejido productivo español en el que, desde el año 2008, se ha sufrido una importante desvalorización del mercado laboral acentuado en las pymes, que representan más del 80% de las empresas.
De igual modo -asegura- “ahora que la mayoría de los sectores proclaman un aumento importante de producción, debemos procurar una redistribución justa de los beneficios que compense esta devaluación”. “Somos conscientes de que para alcanzar éxitos similares en el sector privado debemos superar el obstáculo que supone la obsoleta normativa sindical, consiguiendo una verdadera negociación colectiva que nos lleve a acuerdos que permitan avanzar en la recuperación salarial y de condiciones laborales”.
Como alternativa sindical independiente y profesional CSIF se sustenta en el apoyo de los trabajadores “para acometer los compromisos que la sociedad exige de una organización sindical cuya principal misión es la defensa del interés general de todos los trabajadores, sin posicionamientos políticos y con plena independencia económica”.
CSIF propone finalmente “una representación laboral comprometida, seria y transparente, con planteamientos reivindicativos de corte moderno y profesional, sin ambigüedades ni ataduras ideológicas ni económicas, con plena independencia para negociar la verdadera recuperación del ámbito laboral español. Pretendemos alcanzar una sociedad civil fuertemente cohesionada, sin fracturas territoriales ni ideológicas, donde la mejoría económica se traslade a todos los ciudadanos”.