Existen labores diarias, silenciosas, invisibles, que construyen puentes indestructibles en la educación en valores de los más jóvenes. Este es el caso de la Asociación de Deportistas Malagueños Discapacitados (Ademadis), que desde julio de 2014 realiza acción tras acción con el objetivo de fomentar el deporte adaptado y dar visibilidad a sus protagonistas.
La labor de Ademadis ha sido premiada un año más por la Fundación Victoria debido a la colaboración durante el curso escolar que la asociación le ha ofrecido. “Gracias a su implicación y entrega nuestros alumnado ha conocido un poco más el gran mundo del deporte adaptado y las impresionantes historias de superación que le rodean”, indicó la Fundación en un comunicado, donde deseó que “esta colaboración se extienda muchos años más”.
Y fue precisamente en una de estas charlas, impartida por el exjugador de baloncesto en silla de ruedas en Bilbao y en la selección española sub-20, Yago Sánchez, actual coordinador de eventos de la asociación, cuando de forma espontánea, una vez acabado su discurso.
“Una niña le dio un abrazo inesperado y le dijo que lo ayudaba ofreciéndole su desayuno”, recordó Antonio Vara, presidente de Ademadis, cuya lucha se ha centrado durante estos años en que los nombres de los deportistas más destacados brillaran en calles, plazas y, porqué no, en el Paseo de las Estrellas del Deporte, ubicado en la capital malagueña.