Salvan vidas, luchan contra la contaminación y se encargan de la seguridad del tráfico marítimo. Una tripulación de tres personas, encabezados por Francisco Aragón, que hace las funciones de patrón, dirige la Salvamar Suhail. Con nombre de estrella, esta embarcación de 21 metros tiene como prioridad salvar vidas de las personas, tanto de las que cruzan el Estrecho como de las de los marineros que faenan en el mar como de cualquier tripulante de una embarcación.
Te das cuenta de lo que es la miseria en la vida. Se pasa muy mal, pero te vas a casa con la recompensa de haber salvado unas cuantas vidas y de realizar un trabajo bien hecho"Aragón no pudo precisar el número de años que lleva al frente de la Salvamar sólo que trabaja duro y con la responsabilidad de devolver a las personas a tierra. “Cada día es diferente en la mar. Ahora lo están pasando muy mal los compañeros de Tarifa y Algeciras, donde hay mucha carga de trabajo, porque estas personas vienen en una situación muy extrema”.
Con las embarcaciones que llegan a las costas españolas “te encuentras situaciones muy variadas, desde personas heridas de gravedad, hasta madres con niños o recuperar los cuerpos de personas desaparecidas desde hace tiempo”. A todo ello hay que añadir que trabajan en “situaciones muy extremas no sólo por el peligro de la mar sino por la responsabilidad del trabajo que hacemos”, aseguraba Francisco Aragón.
A pesar de que cada día se enfrenten a situaciones complicadas, cuando tienen que atender a una embarcación llena de personas que cruzan las aguas del Estrecho en busca de un mundo mejor, “te das cuenta de lo que es la miseria en la vida. Se pasa muy mal, pero te vas a casa con la recompensa de haber salvado unas cuantas vidas y de realizar un trabajo bien hecho”. No se les da medallas sino que consiguen una satisfacción personal digna de elogio.
Cuando tienen el aviso a través de las torres de control de la aparición de una embarcación con inmigrantes lo primero que hacen, según el protocolo, es localizar la barcaza para lo que cuentan con la colaboración de la Armada, de Aduanas, de la Guardia Civil… “Todos somos un equipo”. Cuando se halla, se actúa por prioridades con los heridos, enfermos, los niños y las mujeres. “Trabajamos por hacer un rescate lo más seguro posible y que no se pierda ninguna vida”.
La formación que tiene para atender a esta coyuntura fronteriza de la provincia de Cádiz se adquiere con “los años de experiencia que tenemos, es un aprendizaje continuo. La mar es un medio que todos los días te enseña algo nuevo. Hay que ser prudente y tener la suficiente modestia como para aprender. La mayoría estamos capacitados, aunque se necesitaría un poco más de refuerzo técnico”.
El jefe de Salvamento Marítimo en el centro de Cádiz, Francisco Modet, explicaba que a estas personas se les ofrece una primera asistencia cuando son recogidos, a través de kits de supervivencia y mantas, aunque no tienen centros médicos como sí hay en otros países. “El sistema de salvamento que existe en España cubre ocho veces la superficie en mar de la península ibérica, estando la zona más amplia en las islas Canarias”.
La Salvamar Suhail tiene capacidad para “los que haya” y han llegado a montar a 80 personas. Estas personas se trasladan al puerto seguro más próximo, para lo que están en contacto permanente con la Guardia Civil. La zona SAR llega hasta el paralelo 35.50, que cruza Ceuta, es decir, que hay zonas en las que “llega hasta las playas marroquíes”.
La visita a la Salvamar se realizaba en el seno de las Jornadas de Inmigración y Medios de Comunicación, organizadas por el Colegio Profesional de Periodistas de Andalucía (CPPA), con la colaboración de la Fundación Unicaja.
