En el encuentro que mantuvo hace algunos días el concejal de Deportes, Adrián Martínez de Pinillos, con algunos clubes de la ciudad informaba de las obras que se van a llevar a cabo en las cubiertas del Ciudad de Cádiz, lo que va a obligar a cerrar al uso las piscinas de las instalaciones deportivas municipales. Este hecho afectará a cientos de abonados, a los que “no se les prestará servicio, y por lo tanto no se les pasará la cuota”, explicaba uno de los asistentes al encuentro con el representante municipal.
En dicha reunión se informaba que las obras en el Ciudad de Cádiz comenzarán en el mes de noviembre y que tienen un plazo de ejecución previsto de cuatro meses.
Los trabajos consistirán en el cambio de cubierta que permitirá el ahorro y la mejora de la eficiencia energética en el conocido pabellón gaditano. No obstante, fuentes municipales, consultadas por este medio no pudieron confirmar que los trabajos fueran a comenzar en el mes de noviembre. Además de las obras en la cubierta, en las previsiones municipales está, a través del Instituto Municipal de Deporte, cambiar el “vaso de la piscina pero con otra partida distinta a la que se utilizará para acometer las obras”.
Para las cubiertas se ha contado con una subvención de la Junta de Andalucía. El trabajo consiste en cambiar de modelo energético basado en, aprovechar la luz natural durante el día, a través de la instalación de lucernarios, que permitan apagar los focos cuando no es necesario; luego aprovechar la energía solar que cae sobre la azotea, convirtiéndola en calor, para calentar el agua, y luego usar lámparas más eficientes, que las que hay.
Para que los clubes no se encuentren con una merma al cerrarse las instalaciones, el Ayuntamiento se comprometió a buscar una solución en San Fernando y en la piscina de la Universidad en el Campus de Puerto Real, puesto que con la piscina de Astilleros tan sólo se contaría con 72 horas a repartir.