Desde el 5 de septiembre, los responsables de los concesionarios de coches de Cádiz no tienen noticias del equipo de Gobierno de la ciudad, en concreto, del edil de Movilidad, Martín Vila. “Tuvimos una reunión el 5 de septiembre en la que le expusimos el problema con las obras del carril bici y les planteamos medidas alternativas que permitieran crear bolsas de aparcamientos, después de que con las obras se eliminaran los estacionamientos que había en la zona delantera de los concesionarios”, manifestó el secretario de Acoauto, Carlos Cidoncha.
Las obras comenzaron, se colocaron las vallas, y los clientes potenciales de los concesionarios no tenían sitio para aparcar sus vehículos. “El daño estaba hecho, teníamos el problema encima: el suelo levantado, las vallas puestas y una obra que va a un ritmo muy lento e incluso que ha estado muchas semanas paradas”.
La medida paliativa planteada era poner en un único sentido la avenida Alcalde Sánchez Cossío, de tal manera que sólo se permitiera el paso de aquellos vehículos procedentes de San Fernando o del polígono de Poniente. De esta manera el otro carril podría quedar disponible para el aparcamiento de vehículos. Mientras tanto, el tráfico procedente del puente Carranza podría ser derivado por la calle Algeciras, para continuar por la calle Tarifa y salir a la calle Gibraltar, permitiendo el acceso hacia San Fernando.
“Ha sido un varapalo brutal, incluso algunos de los concesionarios ha hecho una inversión para adecuar los establecimientos y aún así, a consecuencia de las obras, los negocios caen”, declara Cidoncha. El secretario de la Asociación de Concesionarios de Automóviles afirmó que “Martín Vila se comprometió con nosotros a trasladar a Zona Franca la posibilidad de usar de manera temporal los terrenos de AGA para aparcamiento, pero no sabemos nada. Le hemos puesto correos electrónicos y no hemos tenido respuesta”.
Asimismo, desde el colectivo, que teme tener que trasladar sus negocios al polígono de Tres Caminos, en San Fernando, declaran que los “negocios han caído. A la gente hay que facilitarles las cosas, lo que no se puede es no dejarles posibilidades para que vengan a Cádiz a comprar”, manifiesta el portavoz de la asociación. Los propietarios de los concesionarios son “accionistas” que apuestan porque su negocio esté en Cádiz, “ahora, si el negocio no funciona, tendrán que irse”.
Otra de las cuestiones que se plantea el colectivo es que durante varias semanas “las obras han estado paradas, y si no, de vez en cuando, aparecen dos o tres operarios por la zona, mueven las vallas y poco más, pero el asunto no avanza”. Martín Vila declaró en esa reunión que dichas obras dependen de la Junta de Andalucía, por lo cual, el Ayuntamiento no podía hacer nada al respecto.
Las obras de conexión del carril bici entre Ronda de Vigilancia y el parque Natural de la Bahía conllevaban la autorización de la Dirección General de Carreteras, que en su momento atrasó todo el proceso.
