La directora gerente de la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA), Mariela Fernández-Bermejo, se ha reunido con miembros de la Cofradía de Pescadores del puerto gaditano de Bonanza, en Sanlúcar de Barrameda, para evaluar las necesidades del sector y conocer la situación de estas instalaciones portuarias.
Uno de los asuntos tratados en el encuentro ha sido la instalación en la que trabaja actualmente la Consejería de Fomento y Vivienda de un centro de depuración de moluscos adscrito a la lonja, con la maquinaria, equipos e instalaciones necesarios para la ejecución y puesta en funcionamiento de un sistema de depuración de moluscos bivalvos. De esta forma, se responde a la obligación de depurar la mayor parte de la producción marisquera de la zona, ya que los bancos marisqueros presentan unas características propias de la clasificación tipo B, que sólo permiten la comercialización para el consumo humano tras su tratamiento en un centro de depuración.
Otro de los asuntos por los que se han interesado los pescadores han sido las obras para mejorar la seguridad del dique exento, con la ampliación del sistema de defensas y el acondicionamiento del alumbrado, lo que redundará de forma notable en las tareas del desembarco de las capturas que actualmente realizan los profesionales del sector, dotando la zona de unas condiciones de atraque y estancias más seguras.
Asimismo, Fernández-Bermejo ha informado de que entre las mejoras de la seguridad en el sistema de defensas del puerto, en las zonas carentes de las mismas se instalarán 40 nuevas defensas que irán ancladas sobre el paramento vertical de hormigón armado del dique. En la actualidad el dique exento se utiliza como muelle de atraque de embarcaciones y embarque y desembarque de tripulaciones. Para mejorar la seguridad de estas operaciones se van a colocar un total de 14 escalas.
Las nuevas escalas son un nuevo prototipo que la Agencia ha diseñado conjuntamente con la Inspección del Trabajo y la Seguridad Social al objeto de poder aportar un sistema de acceso que reúna las condiciones de operatividad, seguridad y resistencia que estos elementos precisan.
Con este conjunto de actuaciones "conseguimos incrementar la seguridad y el control del personal que acceda al muelle, así como de cualquier mercancía que pudiera entrar o salir del mismo, a la vez que se han mejorado las condiciones internas de seguridad del mismo muelle", ha explicado Fernández-Bermejo, que ha añadido que todas estas mejoras, cofinanciadas con fondos europeos, tendrá un coste de aproximadamente un millón de euros.
