Los vecinos de la calle Santa María de La Merced, situada en pleno barrio de Santiago, junto a la calle Nueva, no saben ya dónde aparcar sus coches. Desde el 31 de diciembre alguien se dedica a rajar y pinchar las ruedas de los coches estacionados en la citada vía. Según denuncian los afectados, actúa “a cualquier hora del día”, y no únicamente durante la noche, que es lo más habitual en estos casos de vandalismo, y no tienen sospechas de quién o quiénes están detras. Hay residentes que se han encontrado hasta con dos ruedas rajadas y ya son tres las ocasiones en las que los vándalos han hecho de las suyas. La gracia, como señalan los propietarios de estos vehículos, dura ya casi un mes, pues empezaron a finales de año. Los vecinos se pensaron entonces que era una cosa puntual de Nochevieja, pero la pasada semana volvió a ocurrir, por tercera vez en menos de un mes.
Los afectados han contactado con la Policía Local, que les han derivado a la Policía Nacional para que presenten la correspondiente denuncia y, de esta manera, se incremente también la vigilancia en la zona para dar con los responsables. No es la primera vez que esta zona es objeto de este tipo de prácticas. Hace varios años le tocó también a la calle Nueva, en la que los vehículos amanecían a diario con las ruedas rajadas y los retrovisados destrozados, viéndose afectados incluso por el robo de batería. No hay que perder de vista que actualmente en esta última calle está en marcha operativo específico de seguridad en el que participa la Subdelegación del Gobierno. El pasado verano, Ayuntamiento y Subdelegación acordaban desarrollar un plan de seguridad para reforzar la vigilancia con la presencia de más agentes con el objetivo de erradicar los problemas de convivencia en la zona, después de que la ocupación ilegal de unos pisos fuera la gota que colmara el vaso.