El arquitecto Juan Cascales.
El edificio del Ayuntamiento se abrirá este verano -teniendo en cuenta que el verano dura hasta la tercera década de septiembre- y está pendiente de resolver uno de los muchos problemas que se han ido encontrando los técnicos conforme iban escarbando en un edificio en el que cada uno ha hecho, puesto o quitado a lo largo de los años lo que ha necesitado sin encomendarse a dios ni al diablo.
El problema actual, explica Juan Cascales al programa Patrimonio que dirige Alejandro Díaz en Radio La Isla y que es uno de los responsables de la dirección de obras junto a Francisco Márquez María Jesús Albarreal, Mónica González y Ana Coronado, es que el edificio, históricamente, alberga en su interior un centro de transformación que además de servir al Ayuntamiento proporciona electricidad a parte del Centro Histórico de la ciudad.
Eso ha obligado a construir un centro de transformación exclusivamente para las instalaciones municipales y otro para la zona afecta de los alrededores. En realidad ya están construidos y la conexión eléctrica realizada, aunque falta el convenio de cesión del Ayuntamiento a la empresa distribuidora.
Después hay que conectar ese nuevo centro a la red para desconectar el original. Este verano se van a realizar unas obras de actualización de las infraestructuras de las calles perimetrales afectadas y una vez normalizada la situación desaparecerá el centro de transformación antiguo.
El edificio, pues, se abrirá con esa salvaguardia. Esto es, a falta del proceso de emigración del centro antiguo, por lo que seguirá habiendo algunos cables en las fachadas.
Actualmente se está trabajando dentro del edificio en reparaciones menores, repasos, instalando muebles de la biblioteca, colgando lámparas antiguas que han vuelto al Ayuntamiento y puliendo la pavimentación, además de colocar toda la señalética.
