Un tiroteo masivo en un centro comercial de El Paso (Texas) este sábado, que dejó al menos 20 muertos y 26 heridos, volvió a sacudir a Estados Unidos al convertirse en el acontecimiento de estas características número 249 en lo que va de año.
"Veinte inocentes perdieron su vida hoy en El Paso y más de dos docenas más resultaron heridos", afirmó el gobernador de Texas, Greg Abbott, en rueda de prensa.
Junto a Abbott compareció Greg Allen, inspector de policía de la ciudad, quien remarcó que había 26 personas heridas.
El sospechoso "es un hombre blanco de 21 años", pero Allen evitó identificarle por su nombre.
Afirmó, asimismo, que la investigación preliminar apuntaba "un vínculo con un delito de odio", sin ofrecer más detalles.
El sospechoso se entregó a los agentes de policía en el centro comercial sin ofrecer resistencia.
La matanza se produjo la mañana del sábado en unos grandes almacenes de la compañía Walmart en el sur de El Paso, ciudad fronteriza con México con cerca de 700.000 habitantes.
"Terrible tiroteo en El Paso, Texas. Los informes son muy malos, muchos muertos", dijo Trump en un mensaje en su cuenta de Twitter poco después de conocerse los sucedido y aún sin cifras oficiales.
El mandatario agregó que "estaba trabajando con las autoridades locales y estatales, y las fuerzas de seguridad" y que había "hablado con el gobernador para ofrecer el total apoyo del Gobierno federal".
Igualmente, el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, se mostró "apesadumbrado por la pérdida de tantas vidas inocentes" en la misma red social.
Los almacenes comerciales contaban con gran afluencia de clientes para realizar compras de cara al próximo inicio del curso escolar.
El Departamento de Policía de El Paso publicó esta tarde un mensaje en el que instaba a los ciudadanos a llevar a cabo donaciones ante la "necesidad urgente de sangre" para ayudar a los heridos.
Robert Curado, residente en la ciudad y testigo de lo ocurrido, explicó en declaraciones al diario local El Paso Times cómo se escondió junto a su madre entre dos máquinas expendedoras fuera del establecimiento cuando el sospechoso les apuntó con el arma.
"Allí es cuando el individuo intentó dispararme, pero falló porque como que me agaché", indicó.
David Shimp, director ejecutivo del centro médico Del Sol, uno de los hospitales al que se trasladaron los heridos, informó en un correo electrónico de que sus servicios de emergencia habían recibido a once heridos de entre 35 y 82 años de edad, que estaban en tratamiento.
"Dos pacientes están en situación estable y nueve en condición grave", dijo Shimp.
Por su lado, los líderes demócratas en el Congreso emitieron sendos comunicados en los que instaron a actuar para controlar el acceso a armas de fuego en Estados Unidos y criticaron a los republicanos, que cuentan con mayoría en el Senado, por su rechazo a diversas propuestas legislativas en este sentido en los últimos años.
"Demasiadas familias en demasiadas comunidades se han visto forzadas a sufrir el horror diario de la violencia de armas de fuego. Ya es suficiente. La continuada inacción del Senado republicano deshonra nuestra obligación de proteger a hombres, mujeres y niños inocentes y poner fin a esta epidemia de una vez por todas", subrayó Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes.
El pasado fin de semana se produjo otro tiroteo masivo en un festival gastronómico en Gilroy (California), que dejó cuatro muertos.
"ES UN ACTO DE COBARDÍA"
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, calificó de "acto de cobardía" el tiroteo en un centro comercial de El Paso (Texas) en el que murieron al menos 20 personas y otras 26 resultaron heridas.
"El tiroteo de hoy en El Paso, Texas, no solo fue trágico, fue un acto de cobardía", escribió Trump en su cuenta de Twitter sobre el ataque llevado a cabo por un sospechoso de 21 años que se entregó a la policía.
El mandatario añadió que "no hay razones o excusas que justifiquen el asesinato de personas inocentes".
"Sé que estoy con todos en este país para condenar el acto de odio de hoy", aseguró antes de enviar, en su nombre y en el de su esposa, Melania, sus más sinceras condolencias a los habitantes de Texas.
Previamente, antes de conocerse la cifra oficial de muertos, Trump ya se había referido, también en Twitter, al "terrible tiroteo" y a informes "muy malos, muchos muertos".