El alcalde de Sevilla, el socialista Juan Espadas, ha pedido a la dirección de Tussam acelerar la investigación sobre el nuevo modelo de microbuses que presta servicio en la Línea C5 y que ha producido dos accidentes en la capital, el más grave este sábado con una decena de heridos, de los que tres continúan en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Virgen Macarena.
A preguntas de los periodistas, tras visitar este martes el nuevo ascensor instalado en un edificio de Pino Montano, Espadas, tras lamentar el accidente, ha explicado que desde la misma tarde del miércoles están activados los servicios jurídicos y los técnicos, a la par que se ha dado aviso a la fabricante de estos modelos, Mercedes, teniendo en cuenta que este microbús "también presta servicio en otras ciudades".
"Cuando se reactiva la marcha del vehículo que está parado, se acelera sin que el conductor pueda controlarlo con ninguno de los frenos", advierte. En este sentido, Espadas deja claro que "el conductor no es responsable porque el vehículo, que es nuevo y no es eléctrico, actúa de manera autónoma y completamente incontrolada".
"No tenían ni 18 meses" los vehículos implicados en sendos accidentes, tal como indica el primer edil, por lo que "no es problema de obsolescencia o mantenimiento, sino que ha de ser de fábrica".
Así, detalla que "es un accidente que no tiene correlación con que haya habido algún tipo de relajación o con que no haya actuado Tussam" y ha pedido a la dirección de la empresa municipal que acelere una doble investigación, tanto sobre el vehículo implicado en el accidente del sábado como abordando con las "mejores empresas en el país la identificación del problema, al parecer técnico".
En este marco, el socialista ha explicado que la investigación sobre el primero de los dos accidentes había concluido precisamente el día anterior al que ha provocado una decena de heridos "sin identificar el problema técnico". De hecho, los técnicos han trasladado que le habían hecho "perrerías" para intentar averiguar la causa de esa aceleración "extraña", sin conseguir encontrar el origen.
Por ello, y tras lo ocurrido el sábado, el Ayuntamiento "toma la determinación de cancelar los otros dos autobuses que soportaban la línea", compuesta por cuatro vehículos, "porque no se tenía la garantía absoluta" de que no pudiera volver a pasar. "Si se hubiera identificado antes, se habrían retirado inmediatamente", sentencia.
"No sólo nos interesa a nosotros saber el problema, sino también a otras ciudades que lo tienen en funcionamiento. Mercedes está avisada sobre todas las cautelas que ha de tener con los clientes de este vehículo", indica, advirtiendo que se analizará con la compañía si responsabilidad si el problema es del vehículo.