La convocatoria de ayer para inaugurar otros ocho kilómetros de SE-40 entre Dos Hermanas y Alcalá, que como consecuencia del temporal de agua y viento se tuvo que circunscribir a un acto en la sede de la Delegación del Gobierno en la Plaza de España, sirvió para escenificar las diferencias entre el Gobierno de la Nación y la Junta de Andalucía en lo relacionado con cómo sortear el tramo de esta autovía metropolitana por el Guadalquivir para unir Dos Hermanas y Coria del Río.
La disquisición sigue siendo la misma, si mediante túneles o con un puente, una incógnita que ayer tampoco se resolvió y en la que el ministro en funciones de Fomento, José Luis Ábalos, dejó claro que serán los técnicos los que decidan. “Dejémosles trabajar sin interferencias”, señaló ante el auditorio, en el que se encontraba el portavoz de la plataforma Sevilla Ya, Miguel Rus, quien puso voz al último posicionamiento de la entidad: que se haga la SE-40 ya, dejando la puerta abierta tanto a que se construyan los túneles inicialmente previstos o un puente, solución técnica más barata y rápida de ejecutar, como así aclaró Miguel Rus que se le había trasladado a la plataforma desde las administraciones.
Ábalos reconoció que, en estos momentos, y en relación con el proyecto de los túneles para la SE-40, “no podemos ignorar” los “riesgos” detectados. “Las soluciones que hay son insuficientes. No podemos generar hipotecas inasumibles para el conjunto de la sociedad”. “Lo lógico -apostilló el ministro en un comunicado de prensa- es estudiar las dos alternativas, túneles y puente, ya que una de las prioridades de Fomento es cerrar la SE-40 con una solución técnica y medioambiental viable para la parte sur. El proyecto ha sido modificado en origen y por ello estamos trabajando en un análisis comparativo medioambiental, funcional y económico de ambas soluciones”.
Fuentes del Gobierno aclararon que el debate pues está en el siguiente punto: se está realizando un estudio de alternativa en el que se analizan los pros y contras de los túneles y el puente. Este estudio servirá para tomar la decisión de hacer uno u otro proyecto. En el caso de que los técnicos se decantaran por los túneles, al proyecto inicial habría que hacerle modificaciones para adaptar esos túneles a la nueva normativa, lo que obligaría a tener que elaborar una nueva declaración ambiental.
Minutos antes del discurso del ministro, la consejera de Fomento, Marifrán Carazo, recalcó que, a veces, las opciones en infraestructuras “más económicas, pueden costar muy caras”.
“Huyamos de las imposiciones y estudiemos con rigor” cuáles son las mejores opciones, subrayó Carazo, que, tras dar la enhorabuena al Ministerio por inaugurar ocho kilómetros (“a razón de 1,6 kilómetros por año”) de la SE-40, reclamó “un impulso” a esta infraestructura. La consejera prometió “lealtad” al Gobierno, al que pidió la misma reciprocidad, momento que aprovechó para mostrar su “preocupación honda por la financiación autonómica”.
La titular andaluza de Fomento exigió al Gobierno que no haya “ni intervenciones ni tutelas” sobre Andalucía, a raíz de la polémica suscitada a cuenta del incumplimiento del techo de gasto en 2018, lo que obligará a que Andalucía vuelva al Fondo de Liquidez Autonómica para poder financiarse. El ministro Ábalos, que no contestó a esta reclamación directa, resaltó que en el año y medio de Gobierno del PSOE en España, se han puesto en servicio 38 kilómetros de la SE-40, el doble de lo que había hasta entonces.
Los dos nuevos tramos puestos en servicio desde ayer supondrán un ahorro de 15 minutos para los vehículos que, procedentes de Cádiz, van camino de Madrid, así como permitirá descongestionar de coches la entradas a Sevilla por la SE-30. En total, la inversión realizada por el Ministerio de Fomento ha superado los 97 millones. La autovía cuenta con dos calzadas de tres carriles de 3,5 metros cada una, y con la posibilidad de ampliación a un carril más. Además de estos dos tramos, Fomento ha puesto en servicio el nuevo enlace de El Torbiscal, tras una inversión de 5,53 millones de euros.
