Los reyes se han llevado dos reclamaciones de su visita al Polígono Sur, el barrio de España más pobre según los indicadores del Instituto Nacional de Estadística: más trabajo y más seguridad, sobre todo para hacer frente a las plantaciones de marihuana en los pisos, lo que provoca cortes de luz de hasta 14 horas, como relataron los vecinos que se dieron cita a la puerta del centro cívico del Esqueleto, la primera parada de los reyes en su recorrido por el Polígono Sur.
Don Felipe y doña Letizia se han reunido en El Esqueleto con seis entidades con muchos trienios de trabajo en el Polígono Sur: Fundación Alalá, Atenea, Entre Amigos, Proyecto Fraternitas del Consejo de Cofradías, Cáritas y Cruz Roja. Por ellas, han conocido el trabajo que ha desplegado la Comisión de emergencia creada en el barrio con motivo del confinamiento, como los programas de garantía alimentaria que tuvieron que ponerse en marcha de manera urgente para dar de comer a 700 menores escolarizados y a los que el confinamiento dejó sin el comedor escolar. Igualmente, el dato demoledor de 5.000 familias a las que ha habido que socorrer al quedarse sin ingresos por depender su economía de actividades como la venta ambulante. En el Polígono Sur viven más de 30.000 personas.
Encarnación Rubio esperó a los reyes sentada en la puerta de su casa, un vergel de geranios a cada cual más bien cuidado. Ella, como muchos otros vecinos concentrados en El Esqueleto, ha pedido trabajo, oportunidades para los más jóvenes que “si no tienen nada que hacer, qué van a tramar, pues nada bueno”. Antonio Velasco y Amparo Vera se han lamentado de que Lipasam y la Policía sólo se hayan dejado ver en los últimos días. “No sabía yo que había tanta policía para poder patrullar”, ha ironizado Amparo, que ha asegurado “no esperar nada” después de esta visita de los reyes. El rosario de agravios glosado por Amparo con los vecinos que “cumplen” no tenía fin: sin servicio de taxi, sin polícias que acudan ante las denuncias que se prolongan hasta altas horas de la noche, sin luz durante casi un día entero por plantaciones de marihuana que proliferan como setas y que ponen en peligro la vida dentro de las casas...
La plataforma Nosotros también somos Sevilla ha hecho acto de presencia en el centro cívivo El Esqueleto. Con el cántico “Más trabajo, menos caridad”, los miembros de dicha asociación han pedido al alcalde Juan Espadas que se acercara hasta donde estaban ubicados por las Fuerzas de Seguridad para recordarle la urgencia de contar con un censo de viviendas “real”, más seguridad y servicios municipales que funcionen “todos los días”. Rosario García, la portavoz de la plataforma, ha señalado que todas las peticiones son posibles “si se quiere”.
No faltó la guerra de banderas (y de canciones), entre la española y la republicana. En la concentración en la que participaron varios colectivos de izquierda, entre ellos Adelante Andalucía, y que fue llevada a un sitio más apartado de la acera de acceso al centro cívico, se oyeron proclamas como “lo llaman democracia y no lo es”.
Ya en la Fundación Don Bosco, entidad centrada en programas de formación e inserción laboral, varias decenas de vecinos insistieron en exigir más trabajo y seguridad y en que no “paguen justos por pecadores”. Karima Sabik tiene una tienda en el Polígono Sur desde hace tres años y asegura que “como en cualquier barrio, hay de todo”. Macarena Fernández sugiere que hace falta cuidar más la estética de un barrio donde hay bloques que parecen más propios de un paisaje de guerra. Mientras ella habla, Mercedes Montero, con varias décadas a su espalda como vecina del Polígono Sur, apostilla, por enésima vez, que el barrio lo que necesita es “seguridad”. “Un día nos vamos a morir de un chispazo”, en alusión a los cortes de luz que se suceden desde hace años por la marihuana.
Las altísimas temperaturas registradas en la capital, con los termómetros rebasando los 40 grados, y con una población hastiada de planes y contraplanes, los reyes han estado arropados pero por menos público de lo que suele ser habitual. Nada que ver con horas después en el corazón patrimonial de Sevilla, donde los sevillanos que se han congregado en el Alcázar y la Catedral los han recibido con vítores.
El Comisionado del Polígono Sur, Jaime Bretón, atendió a los medios justo antes de la llegada de los reyes a El Esqueleto. En su comparecencia resaltó que el barrio tiene dos realidades: la del colectivo de personas en exclusión social y la de aquellos, “que son mayoría”, que trabajan, eso sí, en empleos “muy frágiles”. Una economía “frágil” El responsable de la oficina del Polígono Sur reconoció que hay cuatro aspectos que preocupan especialmente a las administraciones: garantizar la comida, la educación, el empleo y la salud. Sobre el primer aspecto, incidió en que, desde el primer momento del confinamiento, se suministró comida por “varías vías” a alrededor de 5.000 familias. En el caso de la educación, y ante la “quimera” de que las familias dispusieran de herramientas digitales, se procedió a repartir materiales y a usar las redes sociales con el fin de que los escolares “no perdieran el curso”. Sobre las medidas sanitarias, recordó la atención las 24 horas a sin techo en uno de las instalaciones deportivas del barrio y, por último, y en lo relativo al empleo, el comisionado Jaime Bretón alabó la tarea de entidades como la Fundación Don Bosco, que intenta dar respuesta al “grave problema” de formación que hay en el barrio y resaltó que la intención de las administraciones fue “evitar duplicidades y la picaresca” en el reparto de las ayudas.
El alcalde de la ciudad, Juan Espadas, ha reconocido el trabajo “conjunto” que se ha hecho en estos últimos años aun reconociendo que existen “problemas”. Problemas para los que ha comprometido ayuda. No obstante, ha subrayado, “lo público es de todos”... Además del alcalde, los reyes han estado acompañados por el presidente de la Junta, Juanma Moreno; la presidenta del Parlamento, Marta Bosquet; la delegada del Gobierno en Andalucía, Sandra García; la ministra de Hacienda, María Jesús Montero; y la consejera de Igualdad, Rocío Ruiz.