El Consejo Escolar Municipal se ha reunido hoy de manera extraordinaria presidido por el alcalde, Miguel Molina, y con representación de la comunidad docente, padres y madres de alumnos, y la Administración local. El motivo de la reunión ha sido valorar la actual situación de la localidad frente a la crisis sanitaria de la COVID-19, y debatir sobre el inicio del curso escolar, previsto inicialmente para el próximo 10 de septiembre.
Durante el análisis de la situación en el término municipal de Barbate, el Consejo Escolar Municipal ha decidido de forma unánime solicitar a la Consejería de Educación un aplazamiento del inicio de las clases. Esta decisión se argumenta en que el nivel de contagio de la COVID-19 se mantiene en una tendencia ascendente, con 66 casos registrados oficialmente a día de hoy, y se prevé que continúe aumentando en los próximos días.
En la petición, que ya ha sido enviada a la Delegación Territorial y a la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía, se fija el aplazamiento hasta el próximo 28 de septiembre, sin menoscabo de futuras prórrogas dependiendo del nivel de contagio. Esta medida, cuya respuesta se espera que sea favorable, se considera prioritaria junto a otras que se debatirán el próximo lunes, 7 de septiembre, en la Mesa Municipal de la COVID-19 y que tendrán como fin paralizar lo más rápido posible la cadena de transmisión del coronavirus y proteger a la población.
El alcalde de Barbate, Miguel Molina, ha valorado que “desde el Ayuntamiento y la comunidad educativa tenemos que tratar de poner freno y conseguir más tiempo para parar el nivel de contagio y garantizar la seguridad de todos”. Por su parte, la delegada municipal de Educación, Raquel Moral, ha dejado claro que “es nuestro deber trabajar para que el comienzo de curso sea lo más seguro posible y estar al lado de docentes, padres, madres y alumnos”.