Este pasado fin de semana, la Policía Local ha conseguido abortar dos macrobotellonas en Sevilla, de cerca de 1.000 jóvenes concentrados sin mascarillas y sin cumplir las distancias de seguridad. El alcalde de la ciudad, Juan Espadas, ha señalado que estas quedadas están "totalmente contraindicadas" en medio de una pandemia, y especialmente cuando ésta está disparada de nuevo en cuanto a número de contagios.
No obstante, Espadas ha subrayado que "esto no es sólo una cuestión policial, sino de responsabilidad". "Las mascarillas y la distancia de seguridad son imprescindibles. Hago un llamamiento a los jóvenes a cumplir con las normas de seguridad", ha insistido en la visita que ha realizado al nuevo centro vecinal Carmen Chacón, en Sevilla Este.
El alcalde ha pedido también "no culpabilizar a todos los jóvenes". "No todos lo están haciendo mal", ha reconocido, tras llamar la atención sobre el hecho de que el momento actual de pico de contagios "no se puede comparar" con el vivido el pasado mes de marzo y que derivó en el estado de alarma y confinamiento de la población.