En numerosas ocasiones se ha especulado con la idea de que Robert Pattinson, que interpreta al vampiro Edward, tenía envidia de Taylor Lautner, el licántropo Jacob. Y no sólo por el mayor protagonismo de éste en la nueva entrega de la saga, sino también por la increíble "química" que Kristen Stewart decía haber comenzado a sentir hacia él.
Finalmente, ha sido el propio Pattinson quien lo ha reconocido: tiene celos de Lautner, aunque el motivo no es ninguno de los anteriores. Es el cuerpazo del hombre lobo lo que hace a Pattinson morirse de envidia. Los celos llegan hasta tal punto que Pattinson incluso se llegó a ver fuera de la saga.
"Me fastidió mucho cuando vi la transformación de Taylor. Me di cuenta que con mi cuerpo de chica prepúber no iba a llegar muy lejos", ha reconocido el actor. Por ello, decidió que el único modo de hacer frente a su musculoso compañero de reparto era machacarse en el gimnasio como él y los resultados son evidentes.