El Arcos CF juvenil de la Segunda Andaluza, a base de casta y coraje, logró salvar un punto en la recta final del encuentro que le enfrentó al CD Guadalcacín, el segundo de la tabla, al que también superó en el goal-average particular de ambos equipos puesto que ganó 3-4 en el Estadio Antonio Fernández Marchán en la primera vuelta.
La primera parte fue de claro color visitante, un equipo que se defendió con orden y contundencia a pesar de que los arcenses pudieron maquillar el marcador en contra en algunas de sus llegadas al portal de Vega, que se mostró algo nervioso en sus acciones, pero los atacantes locales no anduvieron certeros a la hora del remate. En cambio, los guadalcacileños aprovecharon una indecisión de la zaga arcense y una fallida salida de balón de atrás para ponerse en ventaja y marcharse al descanso con tantos de Cata (8’) y Raúl (42’). Se presagiaba un negro panorama para los de Elio Delgado.
En la segunda parte y con el viento a favor, los blanquillos comenzaron a acercarse con más asiduidad a los dominios de Vega, fruto también de su dominio de la parcela ancha, aunque aún les quedarían fuerzas a los delanteros jerezanos para inquietar a Gonzalo, pero las llegadas arcenses eran cada vez más peligrosas, obligando al meta visitante a actuar con acierto en varios ‘mano a mano’ con los delanteros locales hasta que Cristian se largó una volea de ensueño para meterla por la escuadra y acortar distancia. El gol dio alas a los blancos, pero en otra contra visitante Cata puso el 1-3 en el min. 71, un marcador que podía parecer definitivo porque cortaba de raíz la reacción local.
A partir de ese momento, Elio introdujo algunos retoques en su equipo dando entrada a Said para intentar el desborde y se fue a por su rival haciendo un fútbol directo, con envíos constantes de balones aéreos al área y aprovechando las jugadas a balón parado para encerrar al Guadalcacín en su área a base de lanzamientos muy cerrados que ponían en aprietos a la defensa rival. Así fue como llegó el 2-3, obra de Pablo Valle, y el empate a tres, logrado por Ezequiel a base de empuje y tesón para acabar en tablas un partido que se puso muy complicado y que se celebró casi como una victoria porque los tres puntos ya se iban del Antonio Camacho camino de Guadalcacín.