Después de que el pasado mes de febrero fotos de Rihanna completamente amoratada por la agresión que sufrió a manos de su ex novio Chris Brown dieran la vuelta al mundo, la cantante de Barbados, de 21 años, ha cambiado.
Se puede comprobar en los looks radicales que luce, tan punks y atrevidos como sus últimos trabajos musicales. Russian Roulette (Ruleta Rusa) su último disco, es buena prueba de ese nuevo estilo radical y transgresor.
La propia cantante reconoce que tiene un lado "travieso" que le lleva a experimentar cosas nuevas que tengan su punto peligroso y que disfruta con ello. "Soy una chica mala y me gustan las cosas peligrosas", sentencia Rihanna, según informaciones de Contact Music.
En esta línea de probar nuevas experiencias, Rihanna no se corta a la hora de anunciar que su próximo paso en su carrera es la interpretación. De hecho, ya a principios de año se barajaba su nombre para el remake de El Guardaespaldas, que en su día protagonizaron Whitney Houston y Kevin Costner.