La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Sevilla ha archivado definitivamente la denuncia presentada por la decana del Colegio Oficial de Arquitectos de Sevilla (COAS), Cristina Murillo, contra la anterior directiva de esta institución. El auto considera que la actual presidenta de los arquitectos no aporta prueba alguna que sustente las acusaciones de administración desleal, delito societario y falsedad documental que hizo en 2018 contra el equipo del exdecano Ángel Díaz del Río.
Ya el Juzgado de Instrucción archivó dos veces el caso, y ahora la Audiencia Provincial de Sevilla rechaza el nuevo recurso de Cristina Murillo y decreta en firme el sobreseimiento de la causa. El auto señala que “de las diligencias practicadas no se ha acreditado” la comisión de ningún delito, y niega que los certificados expedidos por los propios denunciantes y una auditoría interna aportada por el COAS suponga un “principio de prueba”, según ha informado en una nota de prensa un portavoz de la anterior directiva del COAS.
En relación con la acusación de administración desleal, el Tribunal dice que no existen indicios de “hechos delictivos”, y reprocha a la actual decana que sus escritos están llenos de “meras suposiciones” que “no aportan nada a la causa, más allá de sembrar dudas sobre la gestión realizada […] que tildan con todo tipo de calificativos”. Los magistrados indican que la documentación aportada por los denunciantes no contiene ninguna prueba que ponga en cuestión la legalidad de los fondos transferidos por el COAS a la Fundación para la Investigación y la Difusión de la Arquitectura en Sevilla (FIDAS), de la que es patrono el propio Colegio, por valor de 860.000 euros para el arreglo de su sede en la Isla de la Cartuja. Además, advierte que no se acredita quién o quiénes serían los beneficiarios de una supuesta apropiación indebida, y que en todo caso no podría ser juzgada por estar prescrita.
El Tribunal rechaza que la renovación de los miembros del Patronato de la Fundación FIDAS antes de que expirara su mandato perjudicara a la nueva directiva surgida de las elecciones del Colegio de Arquitectos de Sevilla de 2017 -como mantenía Cristina Murillo en su denuncia-, y acredita que no se incumplieron en ningún momento los estatutos. Por ello, no aprecia que se cometiera delito societario ni de organización criminal, ni tampoco de falsedad documental, como sostenía la actual decana en su recurso.
El auto de archivo dice que los jueces no aprecian “el concreto perjuicio, ni que beneficio haya reportado, cuando ni siquiera consta remunerado el cargo, ni tampoco, que perjuicio a los demás patronos, incluso los de la nueva directiva, le han supuesto, la renovación de determinados cargos, ni a la Fundación”. Y tras reprochar de nuevo que no se aporten pruebas, afirma que en todo caso la denunciante debería haber acudido a la vía administrativa y no a la penal” y señala que “del informe contable que se aporta con la denuncia, no apreciamos falseamiento de las cuentas anuales”.
El exdecano del COAS, Ángel Díaz del Río, considera que con este archivo definitivo de la denuncia por la gestión de la Fundación FIDAS “se evidencia el modus operandi de Cristina Murillo contra la anterior directiva, que no es otro que difamar sobre nuestra gestión sin aportar ninguna prueba”. Díaz del Río ha expresado su satisfacción por el auto de la Audiencia Provincial y su confianza en que otras denuncias aún no resueltas dejarán en evidencia la inconsistencia de las acusaciones vertidas por la actual decana contra su antecesor en el cargo y su equipo directivo.