Unas 2.000 voces pero un solo mensaje: “Puerto Real no se cierra”. Este jueves los trabajadores y trabajadoras de la planta de Airbus de la localidad vecina volvían a salir a la calle. Una vez más de las muchas que lo han hecho en los últimos meses. La manifestación partía de la Glorieta Ingeniero la Cierva para recorrer toda la avenida principal de la capital gaditana hasta llegar a las Puertas de Tierra, donde se encuentra la Subdelegación del Gobierno. En esta ocasión arropados por familiares, representantes sindicales y políticos de casi todos los partidos y ciudades de la Bahía. También les acompañó la Marea Blanca Gaditana. Con los ánimos candentes después de que horas antes la empresa confirmara que concentrará toda su actividad en la factoría de El Puerto y aplicará un ERTE de larga duración. Con la cabeza alta y el puño en alto por defender sus puestos de trabajo hasta el último suspiro.
No voy a encabezar una pancarta con gente que trabaja en la misma empresa que yo y ya dan por hecho el cierre”“Esto se arregla aplicando el convenio colectivo interempresas de Airbus, que viene a decir que en circunstancias como esta hay que prestar atención al reparto de las cargas de trabajo, al mantenimiento de los centros productivos, a mantener el empleo que tanto ha costado acuñar”, señalaba ante los medios Juan Manuel Trujillo, presidente del Comité de Empresa en la planta de Puerto Real.
Con respecto al traslado a El Puerto se manifestaba abierto a la negociación “pero no a cualquier precio”. “Nosotros queremos que Puerto Real sea un centro de producción, y reclamamos y demandamos al presidente de la Junta que se posicione y se ponga a favor de los trabajadores por la continuidad de la planta”, expresaba Trujillo.
Sin embargo, fuentes de CCOO y UGT han confirmado que el próximo lunes aceptarán la propuesta de Airbus de concentrar toda la actividad de la compañía en El Puerto siempre que se garantice que se mantiene todo el empleo de la plantilla y la industria auxiliar, algo que no compromete el comunicado enviado por la empresa. Además, confían en que el Gobierno cumpla su anuncio de convertir Puerto Real en un centro de investigación e innovación 4.0., en colaboración con el clúster aeronáutico.
Por ello Juan Antonio Guerrero, miembro del Comité de Empresa por CGT, junto a sus compañeros sindicales, no caminaba encabezando la manifestación como hacían los representantes de CCOO y UGT, sino que se relegaron a la cola. “Por la mañana en una asamblea algunos sindicatos han dicho que se conforman con el cierre de Puerto Real y el traslado al CBC, así que evidentemente no voy a encabezar una pancarta con gente que trabaja en la misma empresa que yo y ya dan por hecho el cierre”, señalaba. Se ha pedido un receso por parte de los cinco sindicatos para valorar la propuesta hasta el lunes, “pero curiosamente hay un sindicato, UGT, que dentro de la asamblea han dicho que ven como algo bueno irnos al CBC”, apuntaba.
“La empresa dice que va a llevar a cabo los traslados, pero para ello tienen que llegar a un acuerdo con el comité de empresas. Por lo tanto ahí se encontrará con la oposición al menos de CGT. Esperemos que el resto de sindicatos sean coherentes con lo que han estado diciendo durante estos meses y no permitan el cierre”. “Nos queda seguir peleando, se diga o se firme lo que quieran”, atajaba.
El CBC de El Puerto, especializado en aviones militares, había recibido la buena noticia esta semana del Consejo de Ministros de una inversión de más de 3.500 millones de euros en encargos de nuevos aviones y helicópteros para el Ejército del Aire, aunque también la noticia de que en el 2025 se quedarán sin faena para el Boeing 737 Max.
La propuesta de Airbus prevé reforzar las inversiones en la factoría de El Puerto para consolidar la construcción de piezas de aviones para la defensa desde este centro.
Voces políticas
La alcaldesa de Puerto Real, Elena Amaya, volvió a acompañar en la marcha a la plantilla de la factoría. Señalaba que “no podemos olvidarnos de nuevo de la Bahía de Cádiz, de Puerto Real, de los 400 trabajadores y del trabajo indirecto que se genera”. Amaya entiende “que el Gobierno tiene es un porcentaje minúsculo, pero sin lugar a duda no estamos al lado cuando no se mueve un centímetro de donde está y lo que reivindicamos es que escuche a la gente de la Bahía de Cádiz. Ya está bien de que se nos dé la espalda, ya está bien de que tomen decisiones por nosotros y ya está bien de que sigamos siendo el culo del mundo”.
La parlamentaria andaluza Teresa Rodríguez, ha pedido al Gobierno “que retire de inmediato la propuesta que envió a la multinacional y se posicione en un nuevo lugar”. “Aquí por mucho que salgamos a la calle de forma masiva, que lo vamos a seguir haciendo, no va a haber esperanza para la planta de Puerto Real si no hay un cambio de posición por parte del Gobierno”, añadía.
En este sentido, ha afirmado que “hay que recordar que los primeros que plantearon el cierre de la planta a un año fue el Gobierno y las federaciones de los sindicatos, por tanto no se ha visto el gesto de retirar la propuesta”.
Por su parte, la secretaria provincial del PSOE, Irene García, ha defendido la permanencia de la plantilla en Puerto Real. Finalmente el presidente provincial del PP, Bruno García, ha afirmado que “ante el llamamiento de los trabajadores a la defensa del empleo el PP responde y está en la calle”. “Es fundamental para nuestra tierra la industria, debemos tener una industria fuerte y esto se tiene que demostrar en el día a día”.